La bolsa para principiantes en la inversión puede ser un entorno de alto riesgo. Si no conoces las reglas de cómo invertir, los demás traders pueden meterte la mano en el bolsillo y vaciarlo sin misericordia.
Porque la bolsa es un juego de suma cero, algo que a veces los principiantes, y algunos veteranos, olvidan:
Lo que ganas en bolsa es lo que otro inversor pierde. Y al revés.
Y si Warren Buffet, Peter Lynch, George Soros, etc. ganan millones cada año, es porque alguien los pierde. ¿Quién? Pues en buena medida, los inversores particulares.
De hecho, los gestores de bolsa profesionales y los inversores institucionales, suelen estar en el lado correcto de la tendencia general de bolsa. Son los conocidos como smart money, en contraposición al resto de inversores, que son el “dinero tonto”.
Uno de los indicadores contrarios más fiables para invertir es la opinión de los inversores particulares. Existen sistemas de inversión basados en la opinión de los particulares, que cuando se muestrán eufóricos la bolsa baja, y cuando están deprimidos, la bolsa sube.
Por lo tanto, ¿resulta imposible ganar dinero en bolsa si no trabajas en una empresa del sector?
No necesariamente. Existen gestores de hedge funds muy famosos, como Jim Simons de Renaissance Technologies, o Edward Thorp de Princeton Partners que comenzaron su carrera gestionando su propio capital.
Pero al margen de las estrellas de este mundillo, hay muchos inversores y traders particulares que viven de gestionar pequeños capitales, obteniendo más beneficios que la mayor parte de los grandes gestores de capital.
Y eso es posible por varias razones:
- Lo primero es el capital gestionado. Es mucho más fácil obtener un retorno estable con un capital de 100.000 € que con 100 millones. La necesidad de valores muy líquidos de estos últimos hacen que sus movimientos sean lentos y a la larga ese factor castiga sus resultados.
- Otro factor son las imposiciones a los técnicos de los hedge funds por simple política de empresa. A veces puede ser la obligación de usar técnicas neutrales al mercado, es decir, cortos y largos simultáneamente; aunque sea más sencillo obtener ventaja matemática en sistemas solo-largos. Otras veces hay restricciones variadas respecto al estilo de los algoritmos, restricciones a veces caprichosas o complicadas, que acaban por empeorar los resultados.
- Los gestores de riesgo de las empresas de inversión actúan con mucha celeridad ante los beneficios y las pérdidas, exigiendo apalancamiento rápido en el primer caso, y cerrando rápidamente las pérdidas en el segundo. Este tipo de decisiones no siempre tienen un fundamento lógico, especialmente si el gestor tiene un temperamento excesivo.
- En cambio en fondos orientados al largo plazo, las decisiones de inversión son a veces muy lentas. Para hacer una compra, los analistas deben obtener información sobre las empresas, y luego defender la idea en una reunión para que los responsables aprueben o denieguen la inversión. Todo este proceso a veces lleva meses, lo que puede arruinar muchas oportunidades.
- Los traders de empresas no tienen límite a sus beneficios, pero sí a las pérdidas: como mucho les despiden. Eso empuja a estos gestores a arriesgar demasiado, incluso a pesar de los controles del riesgo de las empresas. Sólo hay que recordar el caso de Jerome Kerviel en Societe Generale.
- Los traders particulares corren más riesgo: pueden perder todo su capital, y no tienen gestores de riesgo que les ayuden. Por eso, aquellos que ganan dinero suelen tener un sentido del riesgo muy sensato, y se centran sólo en los aspectos realmente importantes y útiles a la hora de invertir.
En resumen, podemos sacar 2 conclusiones:
- La bolsa para principiantes es muy peligrosa, hay incluso sistemas que se basan en hacer lo contrario que los particulares hacen, porque éstos en promedio pierden mucho dinero.
- Sin embargo, un principiante puede mejorar y convertirse en un gestor de éxito, sin necesidad de trabajar como profesional de una firma financiera. Y muchos superan a los profesionales, que por otra parte no suelen tener brillantes resultados, como comentaba El desastre de los fondos de inversión.
Sólo debemos conocer las reglas.. y aplicarlas.