El Método Pilates es el mejor ejercicio para disminuir el dolor.Una aplicación correcta del método, acudiendo a clases con un monitor formado en Pilates para Rehabilitación y siguiendo sus recomendaciones para casa, ayudará a la disminución del dolor del paciente.
El método Pilates trabaja siempre alargando el cuerpo en su totalidad, esto se traduce, a nivel de la columna en descompresión vertebral. Esto favorece la disminución del dolor en la zona afectada. Además hay que tener en cuenta que el movimiento siempre parte de la región abdominal (faja fisiológica que estabiliza, protege la espalda y neutraliza el exceso de esfuerzo en la región) lo que evita fuerzas que puedan dañar la zona.
Asimismo, durante las primeras sesiones con el método Pilates se trabaja manteniendo fija la zona de la hernia. Durante las primeras clases, la persona aprende a controlar el movimiento de su cuerpo desde el abdomen. Posteriormente, una vez que ha conseguido esto, se van incorporando ejercicios que movilizan de forma controlada la zona de la hernia.
El pilates es una buena opción para tratar a una persona con hernia discal, ya que el dolor que se produce normalmente disminuirá bastante y además relajará los músculos, haciéndolo sentir mucho mejor y menos tenso.