(Los acentos fueron obviados por cuestiones tecnicas)
¿Es verdaderamente universal el sistema de salud?
Debates: politicas sociales,
asignaturas pendientes .Francisco J. Lopez
El sistema de salud argentino es el mas
universal de America Latina. Esta es una idea compartida con orgullo por muchos
compatriotas, al punto tal que, incluso en esta epoca de efervescencia de las
ideas reivindicatorias de derechos, la cuestion del acceso a la atencion en
salud no constituye una demanda social ampliada y no forma parte del debate politico.
El sistema de salud argentino tiene elementos
que parecen inspirados en diferentes visiones ideologico/politicas. El sector
estatal, financiado por impuestos y con infraestructura propia, semeja al
sistema nacional de salud britanico. Por su parte, el sistema de obras sociales
que se financia a partir de los aportes de trabajadores y empleadores, se
parece al aleman y al frances. Luego, el sistema privado con fines de lucro, se
rige por la logica de mercado, modelo del cual es arquetipico el sistema
estadounidense. Puesto que todos los habitantes deben pagar tributos al Estado,
el sector estatal es el unico componente de acceso universal del sistema de
salud.
Desde un punto de vista integral, se advierte
que el sistema de salud argentino no se comporta como un sistema, ya que el
acceso a la salud esta directamente condicionado por el nivel socio-economico y
el lugar donde se vive. Existen tres subsistemas que atienden a poblaciones
diferentes con diferentes coberturas tanto en cantidad como en calidad, sea en
la atencion clinica como en la administracion del acceso a los servicios. A
esto se refieren los estudiosos en la materia cuando nos cuentan la “novedad”
de que el nuestro es un sistema segmentado, fragmentado y estratificado segun
la capacidad de compra de los usuarios. Lo cierto es que la organizacion del
sistema representa una puja de intereses de larga data en la que quedan
atrapados ciudadanos que tienen una vision acotada de lo que realmente esta en
juego.
Esta brecha de desigualdad en el acceso a la
salud parece esconder una vision neoliberal o libertaria de la justicia
distributiva, que naturaliza la desigualdad en la riqueza, el poder o las
oportunidades. Para ellos la desigualdad se debe a las diferencias de talentos,
a determinados rasgos del caracter como la voluntad, o la personalidad. Tambien
es atribuida al azar, a lo que Nozick denomina “loteria natural” (en donde se
puede entrever una alusion a los genes), lo que en terminos darwinianos seria,
la supervivencia del mas apto.
Una ley de reciente promulgacion, no solo no
corrigio esta tendencia sino que legitimo lo que estaba ocurriendo entre las
sombras. Bajo el eufemismo de “planes superadores” promueve una concentracion
cada vez mayor del financiamiento del sistema en el sector privado al permitir
que las prepagas administren la salud de los afiliados a las obras sociales,
pero a expensas de desarticular el modelo de solidaridad, llevandose consigo
los aportes de los pacientes con mayor poder adquisitivo y/o menos expuestos al
riesgo de enfermar. Esta privatizacion progresiva de la salud tambien expresa
el deterioro del sistema de obras sociales y del sector publico, que puede
tambien responder a la misma politica.
Esto es justamente lo que los libertarios
desean, que el Estado no se entrometa en el libre juego del mercado de la
salud. Como si los que recurren a la medicina prepaga lo hicieran a partir de
una libre eleccion entre opciones de atencion de la salud igualmente validas,
de la misma manera en la que compran otros servicios o bienes que solo el
mercado puede ofrecer.
No solo anteponen el principio de libertad al
de igualdad de oportunidades, los libertarios esperan mas del Estado. Pretenden
que este se ponga al servicio del mercado. Este es el tipo de Estado (o de
gobierno) que estatiza deudas privadas, o salva a los bancos luego de las
crisis macroeconomicas que el mismo sistema financiero provoca. La no
implementacion de la Ley del Seguro Nacional de Salud promulgada en los ‘80,
que buscaba asegurar los derechos a la atencion de la salud integrando poblacion
y recursos del sistema, da cuenta de ese acuerdo implicito sobre un conjunto de
premisas de valor respecto de lo que es correcto o no lo es, sobre lo que esta
bien o mal, sobre lo que es justo o injusto, en relacion con la asignacion de
los beneficios y de las cargas entre los miembros de una sociedad.
Francisco J. Lopez es medico. Magister en
Ciencias Sociales y de Salud.
Fuente: Diario Clarin