Cuando un niño acude a la sala de Terapia Ocupacional, las causas pueden ser muy variadas, pero siempre se debe empezar por una valoración inicial.
Para saber el desarrollo de nuestros niños, se suele comparar con el estándar, pero la Terapia Ocupacional da un paso más allá, y no solo le ofrece al niño el tiempo necesario para demostrar las habilidades propias para su edad, sino que también favorece su aparición, y entrena para la independencia futura.
Como decía en el párrafo inicial, se empieza siempre por una valoración, que más que proporcionar datos sobre los que nos falta por conseguir, aporta información sobre cuál es el paso siguiente, y así el Terapeuta Ocupacional puede motivar ese crecimiento de manera normalizada.
Os dejo un listado de algunas de las escalas que se suelen utilizar para realizar una valoración funcional:
- Wee-Fim: Sirve para controlar el avance, medir resultados y detectar posibles retrasos madurativos. Se realiza mediante entrevista u observación. Planteado para niños de 6 meses a 8 años, midiendo las áreas de autocuidado, movilidad y cognitivo.
- PEDI: De manera similar a la escala anterior, detecta el proceso de desempeño en el que se encuentra el menor, y mide resultados. Es de utilidad para niñxs de 6 meses a 7 años y medio. Su administración es mediante entrevista a los padres. En ella se mide el área de autocuidado, movilidad y función social. Además cuenta con ítems de asistencia al cuidador y modificaciones empleadas.
- Test de Harris: Medición de la conciencia corporal a través de lo que representan en un dibujo.
- Reacciones de apoyo: Reacciones de empuje anteriores (a los 6 meses); Reacciones de empuje laterales (a los 8 meses); Reacciones de empuje posteriores (a los 10 meses).
- Bruinist-Oseretsky Test (BOT): Realiza una medición de la función motora gruesa y fina a través de un test observacional. Dirigida a niños de 4 años y medio a 14 años y medio.
- Peabody: Midiendo también la motricidad fina y gruesa como la escala anterior, mediante un test observacional. Diseñada para niños de 0 a 6 años.
En futuras entradas ampliaremos las escalas e intervención enfocadas al ámbito escolar, del juego y de integración sensorial.
Imagen: Senjuti Kundu