Si uno piensa en Chascomús automáticamente piensa en su laguna. Podría pensar en la pesca, en Alfonsín o en el turismo rural. Pero no, la relación es con la laguna. Es que la laguna se lleva todas las miradas, sobre todo al atardecer. Caminar por la costanera es la actividad preferida de locales y visitantes. Tomar mate, tirar la caña y esperar a que haya pique, sentarse en algún bar, correr, andar en bicicleta, sacarse fotos o, simplemente, pasear, son actividades que todos hacen. Y así las vimos nosotros.
Estábamos en Buenos Aires y queríamos pasar mi cumple (de 40!!) lejos de la ciudad y en familia. Pensamos en Chascomús, a unos 120 kilómetros, y nos pareció una buena escapada. La ciudad es pequeña, con un casco histórico sencillo y tranquilo, una zona comercial con todo lo necesario para la estadía, la posibilidad de realizar algunas actividades deportivas y, por supuesto, el marco natural de la laguna para respirar un poco de naturaleza.
La laguna de Chascomús es la segunda laguna del sistema conocido como Las Encadenadas, una serie de lagunas unidas por arroyos en la cuenca del río Salado. Los fines de semana y en temporada alta, los recreos y campings de alrededor se llenan de gente y la pesca, junto con los deportes acuáticos, se vuelven los protagonistas del lugar.
Qué hacer y ver en Chascomús
En la laguna y la costanera
Una de las actividades más comunes es dar la vuelta a la laguna (o la vuelta al perro, como algunos también le dicen). El recorrido es de aproximadamente unos 30 km y la mayoría lo hace en auto o bicicleta, aunque algunos se animan a hacerlo a pie. Nosotros no lo hicimos en bici, pero nos dijeron que se demora aproximadamente unas dos horas y media. Los mejores horarios son durante la mañana, temprano, o al atardecer. No solo porque el calor (en verano) no es tan fuerte, sino porque el sol tiñe a la laguna con sus mejores colores.
La zona conocida como “la escalinata” es donde suelen juntarse muchos jóvenes a tomar mate y guitarrear.
También se puede pescar y realizar deportes acuáticos. Hay algunos clubes de pescadores donde organizan esta actividad, aunque muchos solo tiran la caña en cualquier lugar y esperan. Para los deportes, en temporada alta y los fines de semana van a ver carteles que indican donde se puede alquilar el equipamiento para hacerlos. En general es en los campings o clubes.
Frente a la laguna hay varios restaurantes, parrilladas y confiterías (una de ellas es la famosa Atalaya) y una zona de juegos para los más chicos.
También hay algunos parques, como el Parque de los Libres del Sur y el Parque V Centenario, para jugar a la pelota o tirarse a descansar (pero tienen en malas condiciones los juegos para los más chicos). En esta zona de la ciudad hay que tener cuidado con las motos porque muchos utilizan las calles como pistas de carrera.
Se pueden alquilar bicicletas y caballos.
Monumento a la Democracia
En una de las orillas, frente al caso histórico, se encuentran dos monumentos relacionados con la democracia. Uno es un monumento diseñado por Clorindo Testa en conmemoración de los 25 años de la recuperación de la Democracia en el país luego de la última dictadura militar. El otro es una estatua del ex presidente Raúl Alfonsín realizada en bronce por Luciano Garbati, como un homenaje a su labor política.
En el Casco Histórico
Como la mayoría de las ciudades en Argentina, Chascomús tiene una plaza principal y los principales edificios históricos y gubernamentales a su alrededor. Entre ellos podemos visitar la Iglesia, la municipalidad, el Teatro Municipal, el Club de Pelota y la Casa de Casco.
La Casa de Casco es una casa histórica que perteneció a la familia Casco donde en la actualidad funciona un pequeño museo para conocer la historia de la familia, de la ciudad y de la laguna. Vicente Casco era paraguayo y llegó a Buenos Aires en 1809. Al poco tiempo viajó a Chascomús donde se enamoró y se quedó a vivir. Construyó la primera casa de dos plantas en la ciudad con el objetivo de proteger a su familia de los malones, ya que uno de sus hijos habría sido secuestrado por los indios.
La entrada es gratuita, pero si se quiere se puede dejar una contribución en la caja habilitada para ello. El horario es de lunes a viernes de 8 a 15. Sábados y domingos de 10 a 14 y de 18 a 20.
Iglesia y plaza.
Municipalidad.
Ingreso a la Casa de Casco.
El Club de Pelota es un edificio construido en 1925 por un grupo de vecinos amantes de la pelota paleta. Cuando ingresamos sentimos que estábamos en una especie de “santuario” deportivo. Había cuadros, fotos, medallas y trofeos de muchos habitantes de la ciudad. Es uno de los deportes preferidos de la zona y eso se nota cuando uno recorre con la mirada las paredes del pasillo que da a la cancha y del restaurante principal. También hay cancha de fútbol y salones donde en el pasado se celebraban los carnavales. Cuando estábamos inspeccionando el lugar, llegó un chico para practicar y le ofreció a Tahiel su pelota y su paleta. Nos reímos un rato viéndolo cómo intentaba jugar.
Casa de Raúl Alfonsín.
El ex presidente de la Argentina, Raúl Alfonsín, nació en Chascomús y muchos de sus vecinos conservan muy buenos recuerdos de su persona. La casa que se encuentra en la esquina de Mitre y Crámer lo albergó algunos años de su vida, pero no muchos. “En realidad él vivió muy poco tiempo acá, su casa estaba a unas tres cuadras de la plaza”, nos cuenta una vecina mientras intenta darle un higo a Tahiel y él solo quiere jugar con su llavero. Tanto ella como otros vecinos con los que conversamos tienen una muy buena imagen de Raúl, como lo llaman. “Todas las mañanas pasaba a buscar el diario y se quedaba conversando conmigo”, nos cuenta Julio mientras termina de tomar un mate lavado.
La casa.
Centro de Artesanos
Frente al balneario Lamadrid, al final de la Avenida Perón, hay una plaza donde se ubica la feria de los artesanos. Ideal para comprar cosas lindas y probar comida casera.
Capilla de los Negros
Frente a la feria de los artesanos se ubica la Capilla de los Negros, construida en 1862, como lugar de encuentro de la comunidad negra. Allí se mezclaron rituales africanos con rioplatenses y fue utilizada como lazareto en las epidemias de 1868 y 1871. La Unesco eligió este sitio como uno de los cuatro sitios de memoria en nuestro país dentro del programa “La ruta del Esclavo”.
Fuerte San Juan Bautista
En un predio frente a la laguna se construyó en 1979 una réplica del fuerte a partir del cual se fundó la ciudad de Chascomús. La construcción se realizó en el marco de los festejos por el bicentenario de la ciudad. En la actualidad hay un museo y se realizan actividades folclórica, pero solo los fines de semana y en temporada alta. Cuando nosotros fuimos estaba cerrado y se lo veía, desde lejos, algo abandonado. Posiblemente sea un interesante atractivo para conocer la historia de la ciudad.
Museo Pampeano
En una de las esquinas del Parque Libres del Sur se encuentra el Museo Pampeano. Fue creado en 1939 para recordar el centenario de la Batalla de Chascomús. Tiene siete salas de exposición donde se muestra la historia de la zona y la ciudad. Como todos los museos de este estilo es muy interesante para los amantes de la historia. No es el lugar ideal para llevar a los chicos.
Estación del ferrocarril
Nos quedamos con muchas ganas de ir a sacar fotografías a la antigua estación de trenes, pero es una buena opción para los que gustan del arte fotográfico. La estación se ubica a unas ocho cuadras de la plaza principal. Fue creada en 1865, con el típico edificio con galería al estilo inglés.
Compras
Las calles Belgrado y Libres del Sur son las que concentran la actividad comercial de todo tipo.
Parque acuático Puerto Aventura
Ideal para pasar un día en familia. Nosotros no fuimos porque no hizo tanto calor esos días, pero en pleno verano es una buena opción, sobre todo si viajamos con niños. Hay grandes toboganes de agua, plaza blanda, inflables y zona de parrillas. La dirección es Avenida Pedro Gascón 551.
Algunas fotos más de la ciudad
Los perros son protagonistas de las calles de Chascomús.
Nosotros nos alojamos en las cabañas Los tres duendes (Ecuador 275), ideal para ir con chicos porque tienen pileta y zona de parrilla. De esta manera, pueden estar ahí unas horas mientras los papás toman mate o leen y después, ya en familia, pueden salir a realizar alguna de las actividades propuestas. Pasamos tres días muy tranquilos y festejé mi cumple con mis dos amores.
Chascomús es una muy buena opción para hacerse una escapada desde Buenos Aires. Son un poco más de 120 kilómetros, por la autovía dos.
La ciudad presenta varias opciones para todos los gustos, aunque en los meses más fríos las actividades se reducen un poco, pero los atardeceres se disfrutan igual.
Les recomendamos llegar y visitar la oficina de turismo (en Avenida Costanera España y Espigón dePesca). Allí les darán un mapa muy útil y podrán asesorarlos sobre los lugares para realizar deportes o alquilar equipo. Además, cuentan con una lista de hoteles, apart, cabañas, casas de alquiler, campings y estancias actualizada.
¿Cómo llegar a Chascomús desde Buenos Aires?
En auto, por la Autovía 2.
En combi. Existen varias empresas que realizan el trayecto en combi o en auto particular. Nosotros viajamos con VTC viajes y turismo y fue muy tranquilo el viaje (y el conductor muy responsable). El pasaje cuesta 95$ (por tramo) y los horarios pueden consultarlos en su web (el nombre es un link).
También se puede llegar en ómnibus desde Retiro.