Revista Infancia
Los padres se asustan al oír el diagnóstico de escarlatina, ¿todavía existe?, ¿no estaba erradicada? Pues no: todavía existe y no está erradicada. Lo gordo es que muchos papis se hacen un lío con las enfermedades infecciosas eruptivas. Les resumo la enfermedad pero nos preocupa más la tosferina del bebé recién nacido que le puede causar su muerte por una apnea. Otro día les hablaré de ello.
La escarlatina es una erupción o sarpullido de la piel que a veces se presenta en personas que tienen faringitis por estreptococo. La escarlatina es causada por un germen o bacteria llamada estreptococo del grupo A y se puede contraer por contacto con las secreciones de la nariz o la garganta de una persona infectada. Si uno se toca la boca, la nariz o los ojos después de tocar algo contaminado con estas secreciones, como beber del mismo vaso o comer del mismo plato puede infectarse.
Los síntomas característicos de la escarlatina clásica son: lengua de color rojo fresa intenso, cara rojiza con una zona pálida alrededor de los labios, garganta roja con dolor a tragar, anginas con pus, ganglios del cuello hinchados, erupción o salpullido con puntitos rojos en el tórax y la parte baja del abdomen que puede extenderse por todo el cuerpo y se puede sentir la piel áspera como una lija. A menudo la erupción es más roja debajo de los brazos y la entrepierna. Generalmente dura entre 2 y 5 días. Después de que desaparece la erupción, las puntas de los dedos de manos y pies pueden descamarse.
La escarlatina afecta más a los niños menores de 18 años y se cura con un tratamiento antibiótico adecuado recetado por el médico durante unos 10 días. La infección en sí se cura generalmente en una semana, pero pueden pasar varias semanas antes de que las amígdalas (anginas) y los ganglios inflamados en el cuello vuelvan a su tamaño anterior.
No existe vacuna contra escarlatina.