Este verano estuvieron unos amigos en la aldea y una noche nos prepararon unos espárragos deliciosos que en casa no habíamos tomado nunca. Se trata de unos espárragos blancos cocinados a la parrilla con bien de ajo, perejil y aceite de oliva. Mi versión de hoy tiene bastante menos aceite y aquí os la presento hoy, están muy buenos y es otra forma de tomarlos aparte de los típicos con mayonesa.
INGREDIENTES
-un bote de espárragos de Navarra que no sean excesivamente delgados
-dos dientes de ajo medianos
-una cucharada sopera de perejil seco, mejor si es fresco.
-siete cucharadas soperas de aceite
PREPARACIÓN
Lo primero escurrimos bien los espárragos de su caldo y los reservamos en un plato.
Ahora, en el mortero ponemos los ajos laminados y el perejil y majamos bien. Echamos un poco de aceite y seguimos majando.
Echamos la totalidad del aceite y movemos bien.
Tiene que quedar con un poco más de aceite de lo que se ve en la fotografía.
Ponemos una parrilla al fuego fuerte a calentar tipo carmela o una sartén amplia y cuando esté bien caliente ponemos los espárragos en fila y con una brocha vamos pintándolos generosamente volteándolos para que se impregnen bien por todos lados.
Les damos la vuelta y vertemos el total del majado. Cuando las marcas de la parrilla se graben en los espárragos ya están listos, no olvidemos que ya están cocidos y tardan muy poco.
Es una receta muy fácil y muy vistosa.