Y es que lo nuevo de FX, American Horror Story, podría haber sido una nueva aproximación de la HBO a otro de esos géneros en los que se maneja tan bien, esta vez el del terror puro y duro, y la nueva apuesta de Showtime un nuevo intento de AMC por maravillarnos con otra de esas historias complejas e hipnotizadoras de cocción lenta pero segura. Dos series con temática e intenciones muy diferentes a las que acostumbran a ofrecernos sus respectivas cadenas, pero que, de momento, han acertado de lleno, tanto en audiencia como en calidad, siendo los dos estrenos mejor valorados de lo que llevamos de temporada 2011-12…
"De Friday Night Lights a
Friday Night Horrors"
"No podía faltar un instituto y sus inadaptados"
Una de las grandes virtudes de Murphy es su gran capacidad para afilar los diálogos y crear personajes con carisma, siendo esta virtud nuevamente uno de los mayores baluartes de la serie. Porque si en algo se diferencia este producto oscuro, sexy e incómodo de cualquier otro de terror adolescente al uso, es precisamente por estas tres características, y por lo bien escrita y dirigida que está, desmarcándose completamente de todos sus referentes, y haciéndose fuerte y original en lo que en otras series podríamos tachar de “ida de pinza”. Un producto arriesgado, morboso y sobre todo profundamente adictivo que, mientras aguante el tirón, seguirá siendo uno de los que mejor nos lo hará pasar en los próximos meses."La obsesión por la verdad
a cualquier coste"
Aunque suene un poco precipitado (más bien una osadía), siendo, por el momento, Homeland una estupenda y perfecta mezcla entre el thriller de espías de los setenta y el drama familiar del siglo XI, me atreveré a decir que, si sabe mantener el equilibrio entre ambos géneros, y además se va reinventando un poco cada cierto tiempo, seguro estará entre las máximas candidatas a los Emmys en los próximos años.
El único inconveniente que le veo, tanto a esta serie como a la de FX, es que sus respectivos misterios no den de sí lo suficiente como para crear unas historias sólidas de largo recorrido. Sea este el caso o no, no adelantemos acontecimientos, y disfrutemos mientras tanto de estas dos grandes series nuevas que nos acaban de regalar que, visto como ha sido el resto de estrenos, bien podemos darnos con un buen canto en los dientes.