Estafas y pitos.

Hace años que en mis conversaciones electrónicas orales o escritas con Tom, mi amigo galés, de vez en cuando me llevo un cabreo mayúsculo cuando me dice lo que paga por servicios públicos, electricidad, agua, gas, comisiones bancarias etc. y lo comparo con las estafas que nos aplican los chorizos que dirigen y controlan este país.  

El último cabreo me lo lleve ayer. Tom pagaba hasta ahora 12 libras (unos 16 €) por su ADSL mas todas las llamadas desde su teléfono fijo, repito, las 12 libras incluían todas las llamadas por su teléfono fijo aunque hablase con Nueva Zelanda. Ahora le han cambiado el contrato porque ha sustituido la ADSL por fibra óptica que multiplica por 10 la velocidad de carga y descarga en Internet, que ya era más alta que la mía aunque en teoría yo disponía de más Megas, y ha pasado de pagar 12 a 19,5 libras, sin variar el resto del contrato, es decir, llamadas gratuitas. 19,5 Libras son 27 €. Ahora comparadlo con lo que pagáis vosotros y decidme si no es para mandar al infierno más profundo a las telefónicas, eléctricas y demás chorizos de estafas públicas de este país, y sobre todo a los delincuentes que desde el gobierno permiten tal expolio para poder ocupar cargos con grandes sueldos y poco trabajo al cesar en su cargo.

Al final de mi anterior nota comentaba el absurdo de los pitos a Piqué con la Roja, pero la estupidez en vez de disminuir aumenta. En lo que no estoy en absoluto de acuerdo es con la opinión muy extendida que se pita a Piqué por el comentario en la celebración del triplete sobre Kevin Roldán y la fiesta de Cristiano el mismo día en que habían perdido por 4-0 en el Calderón contra el Atlético, no lo creo ni tan solo después de la ya tradicional metida de pata de Sergio Ramos. Es absurdo que así sea porque en España no hay tantos seguidores madridistas fanáticos y suficientemente enloquecidos como para pitar como posesos por una tontería cuando Piqué juega con la Roja, que vendría a ser lo mismo que Piqué fuese traspasado al Real Madrid y le siguiesen pitando, y sobre todo si se tiene en cuenta que indicaría que han armado mucho más ruido por el comentario de Piqué que con el propio festorro de cumpleaños y la tremenda falta de sensibilidad de Cristiano para con su propia afición y que pasó casi sin demasiadas críticas y sin cabreos o silbidos. Por más que insistan del Bosque y los jugadores de la Roja, sin meter la pata como Sergio Ramos, no creo que cesen los silbidos porque no tienen nada que ver con el futbol. Para mí está más que claro que la única razón por la que pitan a Pique es porque es el jugador del Barça que más se ha identificado con el tema soberanista con varios comentarios defendiendo el derecho a decidir, acudiendo a la V de la manifestación del 11 de septiembre del año pasado y clavando una bandera catalana en el centro del Camp Nou en la misma celebración del triplete. Si Pique fuese gallego, andaluz e incluso vasco y hubiese hecho un comentario como el de Kevin Roldán a estas alturas todo el mundo lo habría olvidado. Por cierto, los pitos a Piqué y muchas otras cosas me recuerdan continuamente una pancarta que vi en la manifestación contra el recorte del Estatut, la pancarta, en catalán, decía “NO NOS VAMOS, NOS ECHAIS”, una verdad como un templo.