Un optometrista canadiense llamado Careth Webb ha creado unas lentillas biónicas capaces de mejorar de forma notable la agudeza visual y triplicar esa relación que tradicionalmente se usa y que indica que una visión 20/20 revela que una persona tiene una vista en perfectas condiciones. Ya habíamos conocido proyectos similares e incluso lentillas con zoom, y este desarrollo es igualmente destacable.
Las llamadas Ocumetics Bionics Lens se pueden injertar sin dolor en los ojos con un procedimiento quirúrjico de tan solo ocho minutos que es idéntico al que se sigue para tratar las cataratas. Este desarrollo se ha completado tras ocho años de investigación y su base es el uso de una diminuta cámara biomecánica que permite cambiar el enfoque de una forma mucho más rápida de lo que lo hace el ojo humano.
Una cámara en tu ojo
Estas lentillas plantean una posible solución a las cataratas, una afección común sobre todo llegadas ciertas edades. A medida que nos hacemos mayores, el cristalino puede verse afectado por una opacificación total o parcial, lo que hace que las imágenes aparezcan borrosas. En la operación para injertar estas lentillas se erradica ese problema, pero además presenta otras ventajas.
Su creador indica que la tecnología de la cámara integrada en la lentilla permite producir paisajes visuales tridimensionales en imágenes ópticas formadas de forma natural y hacerlo en tiempo real sin que aparezcan mareos, cansancio visual o dolores de cabeza. Esa prestación podría incluso hacer según el Dr. Webb que su aplicación sustituyese a las pantallas de dispositivos móviles, televisores o pantallas de ordenador, suministrando una especie de Google Glass integradas en nuestros ojos.
Webb también indicaba que su tecnología tenía muchas ventajas con relación a las llamadas lentillas líquidas que no solo se postulan como alternativa a las lentillas normales, sino también a los objetivos de las cámaras fotográficas convencionales. Según este experto, su desarrollo es superior en costes, tiempo de respuesta, resolución óptica, rango de enfoque, estabilización de imagen, consumo energético y apertura focal. Ahora queda por ver si las pruebas clínicas -primero en animales- dan buenos resultados. El Dr. Webb espera que las lentillas estén disponibles comercialmente en 2017.