¡Cuántas posibilidades en tan poco espacio! Y es que hay decoradores e interioristas con mucho talento, pero no podemos olvidarnos de los estilistas cuya labor con los detalles es imprescindible y que saben, a golpe de accesorio, cambiar completamente el estilo de una vivienda. Las agencias inmobiliarias lo saben bien y cada vez recurren más a los servicios de estilistas y fotógrafos profesionales para poner a punto las casas a vender (home staging).
Este pequeño piso de 52 m² con balcón no resultaría igual de atractivo si se hubiera dejado a la suerte del propietario vendedor. Textiles, menaje, objetos de adorno y el propio mobiliario están perfectamente estudiados para que el que visite la vivienda se imagine ahí en su día a día. Por cierto, la chica que aparece en las fotos es Mimmi Staaf, es la que se ha encargado del estilismo de esta vivienda. ¡Feliz martes!
Vía: Fantastic Frank, estilismo: Mimmi Staaf, fotos: Martin Wichardt