Para conseguir un estado de salud óptimo es crítico el evaluar nuestro estilo de vida y tener en cuenta nuestros rituales y rutinas, desde cómo nos levantamos hasta cómo nos acostamos, pasando por cómo descansamos, para poder ser conscientes de cómo podríamos mejorarlos.
Al levantarnos…
El modo en que se empieza el día va a determinar el modo en que se desarrolla el resto de la jornada. Estirar y hacer unos cuantos ejercicios de acuerdo a nuestra condición física nos activa en todos los sentidos y nos hace encarar el día de otra forma. Un coach de salud te puede ayudar a planificar tus hábitos de ejercicio y sobre todo sostenerte hasta hacerlo automático, la idea sería “lo que se mide se consigue”.
- Hay que dedicar tiempo suficiente al desayuno, no tiene porqué ser excesivo ni muy largo, ya que vamos a realizar la comida principal al medio día, pero sí pausado y variado (fruta, infusiones, pan integral, mermelada, yogures etc. son productos sanos y recomendados en general).
Durante el día…
- Simplifica y da prioridades en tu vida. Esto se logra mejor planificando tus tareas y objetivos del día. Si sabemos que nuestras prioridades son las que hemos escrito (lo que no escribimos no es importante...) decidamos que van a ser esas y sepamos decir NO al resto. Planificar es una de las claves para asegurarnos el equilibrio y la felicidad.
- Evita los tóxicos me estoy refiriendo al alcohol, el tabaco y otras sustancias que crean dependencia. Estos tóxicos son verdaderas trabas que nos ponemos absurdamente a nuestra salud, aunque en teoría queramos estar sanos.
Después de muchas investigaciones alrededor del alcohol se ha concluido que un vasito de vino o cerveza no tiene por que ser perjudicial en nuestros hábitos. Pero el exceso de alcohol, muchas veces y según las edades es difícil de controlar por ello ciñámonos al principio de la moderación.
No existe nada peor que tener dependencias, de tabaco, fármacos, comidas etc. Identifiquemos ese momento en el que nos estamos convirtiendo en "adictos" y evalúa seriamente la necesidad de cambiar el hábito, si existen rasgos de personalidad adictiva habría que dejarse ayudar.
- Dosifica tu vida virtual: como internet, correos electronicos, televisión, teleconferencias, telefono movil, etc, pon atención en que te sirvan a ti y no tú a ellos, son accesorios para tu vida, no tu vida en sí mismos.
- Evita las comidas rápidas atracones o caer en el binomio estrés-relax, tu cuerpo no lo resistirá y aparecerán las contracturas, dolores de espalda y trastornos psíquicos.
- Entiende tu propio equilibrio y respétalo. Encuentra la dosis correcta de trabajo, movimiento, comida, reflexión, extroversión y disfruta de la armonía que sientes llegado este punto.
Al acostarnos…
- Garantizarnos un buen descanso es algo primordial. Sin un buen descanso nuestro “reloj interno” pierde su ritmo y comienzan a aparecer los achaques, provocando malos hábitos. Procura dormir bien para que tu cuerpo pueda interiorizar esa cadencia y si tienes la costumbre de trasnochar prueba a adelantar la hora de irte a dormir con un poco de música suave, una infusión etc… Agradecerás toda la energía despejada de la mañana y verás lo que te cunde el día al madrugar un poco más.
¿Qué cosas estás tolerando en tu estilo de vida que te gustaría cambiar?