El proyecto Open Shore, del cual estamos actualmente desarrollando algunas partes, propone soluciones a algunos de los retos de la ciudad de West Palm Beach, Florida, desde varias perspectivas complementarias. Retos que, por otro lado, comparte con muchas otras ciudades costeras.
A continuación os contamos con más detalle nuestra estrategia para activar el cambio en el frente de la ciudad hacia la laguna.
Como se presenta en la página web del concurso Shore to Core, West Palm Beach es una ciudad joven en pleno crecimiento. La región se asocia generalmente con la importante comunidad de personas retiradas que se mudan allí en busca de un estilo de vida más relajado y un mejor clima, pero además hay una creciente población de jóvenes entre 20 y 30 años, así como una gran comunidad afroamericana e hispánica. El centro de la ciudad y las 10 millas de frente marítimo brindan una gran oportunidad para desarrollar nuevas actividades que conecten con diferentes sectores de la población.
Algunas de las preguntas planteadas por el concurso era: ¿Cómo re-imaginar el centro de la ciudad para hacerlo más atractivo y vibrante? ¿Cómo pueden las ciudades recabar información que alimente las estrategias adaptación y crecimiento? ¿Cómo podemos facilitar la interacción social entre grupos diversos? ¿Cómo podemos construir un ambiente que mejore la vida de los residentes física, mental y socialmente?
En este artículo os compartimos el análisis previo y la estrategia general que utilizamos para generar el diseño de cada área del proyecto.
Visión: Mirando hacia el futuro
Nuestra visión para West Palm Beach es la de una ciudad accesible y abierta a los ciudadanos y a los visitantes. Una ciudad activa con personas diversas y actividades durante todo el año. Una ciudad abierta a la laguna, con un centro de la ciudad repleto de sitios únicos y atractivos y experiencias urbanas innovadoras. Una ciudad saludable y confortable para todos, con espacios para niños y mayores para jugar, trabajar, descansar, comer, meditar y conocer a otras personas. Una ciudad que las personas quieran visitar y donde quieran vivir.
Oportunidades, estrategias, resultados
El primer paso para la elaboración del proyecto de Open Shore fue analizar el contexto para definir las oportunidades existentes en West Palm Beach. Analizamos 6 aspectos clave para entender el lugar desde diferentes perspectivas: Sociedad, clima, salud, movilidad, sitios y actividad. El siguiente vídeo resume los hallazgos clave que surgieron de este análisis urbano preliminar, y que han sido cruciales en la definición de las estrategias de diseño:
¿Cómo activar el cambio?
Nuestro enfoque de proyecto entiende West Palm Beach como un conjunto desde la perspectiva urbana, cultural, social, económica y ambiental. Analizamos la información disponible y realizamos nuestras propias encuestas y entrevistas para identificar problemas relevantes y áreas de oportunidad en relación con las nuevas experiencias urbanas que se buscaban.
El área del frente marítimo es donde la ciudad muestra su mayor potencial, pero también sus necesidades de mejora: establecer una mejor conexión con el resto de la ciudad; lograr un mayor equilibrio frente a las fluctuaciones estacionales; mejorar la inclusión social y la diversidad; aumentar la densidad urbana hasta alcanzar niveles sostenibles de actividad; reforzar su resiliencia frente a los impactos climáticos, sociales o económicos; aumentar la accesibilidad el confort de los espacios públicos, etc.
En base al estudio inicial, se propuso abordar las transformaciones repensando tres áreas claves de West Palm Beach: El frente marítimo, los callejones secundarios (alleyways) y el edificio Banyan Hub. En paralelo, una estrategia transversal toca otros puntos clave en la ciudad para reactivarla de forma coherente y conectada.
Movilidad y accesibilidad
+ Conectando el centro de la ciudad con los suburbios: La propuesta de diseño debe ser inclusiva y atrayente, permitiendo que todos sean parte de la nueva vida urbana y de las actividades del centro. Por ejemplo, la propia presencia de más jóvenes en el centro urbano afectaría positivamente a esta zona de la ciudad, equilibrando la actual pirámide de población.
+ Movilidad sostenible y mejora del espacio público: La movilidad es clave para la transformación del centro de WPB en un ambiente más urbano, eficiente y amigable. Ante todo es necesario mejorar el transporte público para permitir que las personas de las suburbios puedan llegar al centro sin la necesidad del vehículo privado.
+ Optimización de la gestión de los aparcamientos existentes: El centro de WPB tiene numerosos estacionamientos en superficie y edificios de estacionamiento, tanto públicos como privados, todos relativamente cerca entre sí y cerca del frente marítimo. Detectamos la falta de un sistema de gestión integral que permitiera a los ciudadanos encontrar el aparcamiento libre más cercano a su destino final. Un uso más óptimo del aparcamiento también liberaría espacio para usos más atractivos y rentables, como deportes, eventos, etc., en lugares que actualmente se usan a tiempo parcial para aparcar.
+ Mejorar la transitabilidad para tener un centro más animado: Mejorar la experiencia peatonal en un sitio implica mejoras en términos de accesibilidad, inclusividad, atractivo, seguridad y confort. Un centro caminable será un centro mejorado, capaz de atraer a las personas a vivir, trabajar y disfrutar en él.
Resiliencia y cambio climático
+Introduciendo una perspectiva ecológica en los aparcamientos existentes: La extensa área cubierta por asfalto u hormigón es uno de los principales problemas ecológicos en una ciudad de baja densidad pero con una gran infraestructura. Utilizando técnicas de paisajismo es posible aumentar progresivamente el área permeable y al mismo tiempo tratar el agua de escorrentía. Los aparcamientos también ofrecen una gran oportunidad para incluir más vegetación, mejorando el clima y el confort en el tejido urbano que los rodea.
+ Aumentar la permeabilidad de las calles y mejorar la gestión de las aguas pluviales: Las calles de WPB son parte del sistema de movilidad de la ciudad, pero también juegan un papel fundamental en el sistema de gestión del agua: sirven para recoger el agua de lluvia y redirigirla a la laguna. Las mejoras en la permeabilidad de las calles tendrían un gran impacto en el ciclo del agua.
+Resaltando el metabolismo de la laguna: Al ser una ciudad costera, West Palm Beach tiene un impacto en la calidad del agua de la laguna Lake Worth. Es necesario evitar que los contaminantes lleguen a la laguna para mantener y mejorar su estado biológico natural. Mejorar el ciclo del agua, monitorizar la contaminación y fomentar las políticas de tratamiento de agua son acciones clave para poder atraer a las personas y las actividades hacia la laguna.
+ Adaptación al aumento del nivel del mar con una estrategia de resiliencia global: La propuesta para el frente costero aborda la cada vez más cercana problemática del aumento del nivel del agua en la laguna Lake Worth, prevista durante los próximos 100 años. También es necesaria una estrategia más amplia y eficaz, requiriéndose una planificación urbana más consciente para evitar nuevas construcciones en terrenos bajos y fomentar las operaciones en zonas más seguras.
Perspectiva urbana
+ Introducir una mezcla funcional y gestionar un desarrollo urbano más amplio: Las extensas zonas residenciales de baja densidad requieren un intenso centro de ciudad. La variedad de usos aumentará la “urbanidad” y el nivel de resiliencia económica de la ciudad, atrayendo nuevas inversiones e impulsando la economía local.
+ Aumentar la actividad durante todo el año y reducir las fluctuaciones estacionales: Dos factores principales influyen en las fluctuaciones estacionales de la economía y la vida urbana del WPB: el turismo y el propio clima que lo motiva. Estas grandes fluctuaciones tienen un gran impacto económico y social. El primero se puede abordar creando un centro de la ciudad más activo, capaz de atraer a más ciudadanos y usuarios permanentes cuya presencia en la ciudad no dependa del turismo. La segunda puede abordarse reduciendo el impacto de las condiciones climáticas adversas y mejorando el confort en el espacio público.
+ Generar una visión a largo plazo para fomentar los Catalizadores Urbanos: Es necesario promover y fomentar el desarrollo de edificios de uso mixto como el Banyan Hub, capaces de generar innovación mediante la interacción entre diversos usuarios y actividades en una fructífera proximidad.
+ Adoptar un enfoque ecológico y pedagógico: La transformación del WPB puede convertirse en un ejemplo nacional e internacional. Una experiencia piloto para atraer visitantes combinando naturaleza y tecnología.
Resistencia, adaptación y renaturalización
La propuesta de rediseño para el frente marítimo se ha diseñado teniendo en cuenta la estimación de que el nivel del mar subirá un metro en el próximo siglo. Trabajando con la topografía es posible construir un frente costero que permanezca utilizable independientemente del nivel del mar, incluso en el caso de mareas muy altas. Además, las variaciones hacen que el espacio evolucione con el tiempo y se haga más interesante, ampliándose y reduciéndose en función de la hora, el día y el año. En términos de resiliencia, otro factor importante es la preparación de todos los elementos urbanos para eventos climáticos extremos como tormentas y huracanes.
Todas las estructuras están diseñadas para resistir vientos fuertes, por su diseño y comportamiento flexible. También están pensadas para ser desmontables y para permitir una reparación rápida y asequible en caso de daños.
Pese a ser una extensión artificial de la ciudad, todo el frente costero trabaja junto con los procesos naturales, como un nuevo ecosistema. Por ejemplo, el proyecto tiene en cuenta el ciclo del agua, encontrando formas de absorber, filtrar, reutilizar y devolver el agua de lluvia a la laguna y al mar. Permite que el agua fluya hacia el espacio urbano, y que el espacio urbano se abra hacia el agua.
Como parte de un proceso de “renaturalización”, el frente costero explora muchas posibles relaciones entre la construcción y la vegetación, dejándola crecer sobre estructuras, bajo cubiertas artificiales, en superficies verticales o en pavimentos híbridos y permeables.
De esta forma se desdibujan los límites entre un espacio urbano y uno natural, creando muchas oportunidades para experimentar uno, otro o ambos al mismo tiempo.
Una interacción físico-digital constante
El nuevo frente costero de WPB se convertirá en uno de los primeros espacios públicos intencionalmente aumentados del mundo. Las personas podrán interactuar con el espacio físico de forma innovadora, ya sea desde sus propios dispositivos móviles o a través de sencillas interfaces incluidas entre los elementos urbanos, utilizando tecnologías disponibles como sensores, controladores, protocolos de conexión estándar y aplicaciones móviles.
La habilitación de una capa digital para la información, el control y la comunicación abre un nuevo y amplio abanico de posibilidades para espacios públicos sensibles a la interacción humana y activamente controlados. Esto puede lograrse, no construyendo una “ciudad inteligente” automatizada, sino potenciando una generación de “ciudadanos inteligentes” conscientes que utilizan sus datos y herramientas digitales para adaptar su entorno urbano a sus propias necesidades.
A continuación os dejamos el documento completo en inglés, con una descripción mucho más detallada del planteamiento urbano y del tipo de intervenciones que se proponen a lo largo del frente costero.