Empezamos la semana con un post que nos hace mucha ilusión compartir con vosotros. Como muchos ya sabéis por las redes sociales, llevamos un tiempo con la reforma, amueblamiento y decoración del nuevo estudio y por fin hoy os podemos enseñar la primera parte del cambio. Hemos pensado dividir esta transformación en dos partes; la primera es la reforma del espacio y la segunda parte será la parte de amueblamiento y decoración.
En esta primera parte de reforma ampliamos el espacio, tiramos tabiques, movimos instalaciones e iluminacion y cambiamos el suelo. En la primera imagen podéis ver el espacio antes de la reforma. Como veis era un espacio muy oscuro, con un recibidor muy cerrado que impedía que llegase la luz y que trituraba en exceso el espacio.
Por eso lo tuvimos claro desde el principio, quisimos tirar tabiques y abrir el espacio. Así conseguimos una amplitud que de ninguna manera podríamos haber tenido manteniendo las particiones originales.
Por supuesto tirar tabiques nos obligó a replantear y mover instalaciones de sitio y además nos encontramos con un gran desnivel en el suelo... ¡un escalón de unos 20cm! Así que tuvimos que nivelar el suelo y, una vez nivelado, colocar el suelo definitivo. Y esto nos llevó a una de nuestras partes favoritas de la reforma: ¡el suelo nuevo e impoluto!
Para la elección del suelo decidimos poner un laminado de aspecto nórdico, que al mismo tiempo fuese discreto y resistente. En esta ocasión nos fuimos aBauhaus a ver qué opciones tenían, y nos encantó la selección de laminados que ofrecen. ¡¡No sabéis que variedad!! ¡¡Estuvimos más de 1 hora para decidirnos!! Además de ser laminados de acabado muy natural son muy resistentes, y para prueba el vídeo que os pusimos en redes en el que aparecemos dándole golpes al suelo de mala manera y ni una muesca oye... =)) Un vídeo que blogger ha decidido no subir... (si logramos ponerlo otra vez a lo largo de la mañana, ya veréis los golpes que recibió el suelo).
¡Emoción máxima cuando recibimos las cajas del suelo y en seguida nos pusimos manos a la obra! Ya nos pareció bonito en tienda, pero puesto quedaba aun mejor. ¡Nos encanta! Sin duda alguna, muy recomendable.
Una vez tuvimos claro el suelo, estuvimos estudiando el tema de la iluminacion y decidimos poner
dos lamparas de inspiración industrial, pero de tacto silicona,como lámparas de techo puntuales, y 1 tira led oculta en la moldura del caserón de la entrada alumbrando la zona de acceso, un simple detalle que da una iluminacion ambiental súper agradable.
Intentamos respetar al máximo los techos y molduras originales, y dejamos la puerta modernista que quitamos del recibidor antiguo como elemento decorativo que da la bienvenida al nuevo estudio (¡es espectacular!). Y bueno, a falta de una manita de pintura general, este es el resultado del espacio. La verdad es que nos hemos emocionado con las fotos, pero es que parece mentira lo que cambia el aspecto la elección de un buen suelo, ¡nos parecía ya precioso así, sin nada más, tal y como lo veis! =) La armonía que forman con los pilares de hormigón es alucinante. ¿Lo vemos?
¡De verdad que no os podéis imaginar qué sensación de desahogo! Es como entrar a un espacio absolutamente distinto. Fijaros en la poquísima luz que parecía tener, y ahora es todo luz natural a raudales. Ya con este cambio, a falta de todo el amueblamiento y la decoración que os enseñaremos en la parte II, sentimos que ya podíamos trabajar a gusto.Esperamos que os haya gustado el cambio y que os apetezca ver la continuación. ¡Nos vamos a volver locas enseñando cada rincón! ¡Ayyyy, que ganas!
¡Un beso family 2.0 y hasta el miércoles!
Podéis venir a vernos cuando queráis =)