Estrés y cáncer

El cáncer es el resultado de un crecimiento desordenado e incontrolable de las células del organismo. Está científicamente probado que una mala alimentación mantenida en el tiempo combinada con una continua exposición a agentes tóxicos de diversos tipos pueden favorecer la aparición de esta terrible enfermedad.

A partir de aquí podemos hacernos la siguiente pregunta: ¿además de estos elementos, pueden influir los factores psicológicos en el inicio o en el curso de un cáncer? La investigación en este área es muy extensa, habiéndose desarrollado gran cantidad de estudios con pacientes de cáncer con el fin de recabar información. La conclusión: sí, influyen mucho más de lo que nos imaginamos.

Está demostrado que el estrés psicosocial ejerce una gran influencia sobre la aparición de un cáncer. Acontecimientos vitales estresantes tales como la pérdida de un ser querido, el desempleo o una simple ruptura emocional pueden desencadenar en nosotros grandes sentimientos de indefensión y desesperanza. Dado que el cáncer está muy asociado al sistema inmune, estos dos factores contribuyen a su desarrollo, pues el cuerpo parece “rendirse” y no querer seguir viviendo ante tales circunstancias.

Otros factores como las características de la personalidad y la depresión también estarían muy ligados a la aparición de este trastorno.