Estructura de la matriz de la mitocondria
La matriz mitocondrial se define como la región que se encuentra envuelta por la membrana interna mitocondrial y en la cual se encuentran las crestas mitocondriales. Adicionalmente a cierto conjunto de enzimas, la matriz mitocondrial también contiene ribosomas.
Estos ribosomas no son transportados desde el núcleo o el retículo endoplasmatico rugoso, los ribosomas de la mitocondria son ensamblados en la misma mitocondria, los cuales poseen un tamaño considerablemente menor.
Figura EM-01. En la presente imagen podemos observar la representación del ADN mitocondrial que se encuentra empaquetado de manera circular al modo de los procariotes, aunque con la diferencia de que existe en múltiples copias.
En la matriz también se encuentran varias moléculas de ADN que no están almacenadas como cromatina, sino en forma circular tal como ocurre en los procariotas. Por lo anterior podemos decir que la mitocondria posee su propia maquinaria genética, para la duplicación de ADN y para la expresión de productos génicos en forma de ribosomas o proteínas propias.El tamaño del ADN mitocondrial varia de especie en especie, en el caso de los humanos codifica para un pequeño número de polipéptidos mitocondriales clave “13 en los seres humanos” los cuales se encuentran íntimamente integrados en la membrana interna de la mitocondria junto con polipéptidos codificados por el núcleo.
El ADN de la mitocondria humana codifica 2 ARN ribosomales y 22 ARN de transferencia que son usados en la síntesis de proteínas en el interior de la célula. El ADN mitocondrial mtADN es una reliquia evolutiva, siendo este el legado de una o unas pocas cepas de bacterias aeróbicas que comenzaron a vivir de manera endosimbiótica con la célula eucariótica. La mayoría de los genes de este antiguo simbionte fueron o perdidos o transferidos al núcleo de la célula anfitriona, dejando solo un puñado de genes que codifican las proteínas más hidrófobas, poco solubles y de difícil transporte.
Resulta un dato curioso la naturaleza del ARN polimerasa que sintetiza varios de los componentes mitocondriales, no se parece ni a la del núcleo de la célula eucariota, pero tampoco a la de las bacterias, de hecho se asemeja más a la de ciertos virus. Este detalle marca una pista importante, la evolución por endosimbiosis es un proceso altamente complejo que posiblemente requiere de otros agentes como los virus, los cuales son importantes en el sentido de que sirven como mecanismos de incremento de variabilidad, es decir son mutagénicos.
Por una gran variedad de razones, el ADN mitocondrial humano es bastante útil para estudiar los patrones de migración humana y su evolución. Varias compañías emplean el ADN mitocondrial para rastrear el linaje de sus clientes quienes desean conocer las raíces más antiguas más allá de fuentes históricas escritas, y más allá incluso del lenguaje escrito “y por mucho” PRINCIPAL REGRESAR