En este apartamento tan reducido de 33,5 m² han logrado crear una atmósfera acogedora y elegante mediante el uso de colores agradables y detalles vintage. Desde el color crema rosado en la pared hasta el sofá verde, los múltiples accesorios y cuadros, y por supuesto, las plantas, todo se une para crear un ambiente bohemio de estilo nórdico. El color de las paredes juega un papel crucial en la creación de la atmósfera deseada. En este estudio nórdico, han elegido un tono crema rosado suave en las paredes. Este color cálido y calmante proporciona un fondo perfecto para el resto de la decoración. Además, es una opción versátil que se adapta a diferentes estilos de mobiliario y accesorios. El sofá suele ser el centro de atención en cualquier sala de estar, pero en este caso el color claro verde botella, se complementa con el resto sin destacar en exceso. Para lograr un ambiente vintage bohemio, han introducido una gran variedad de accesorios y cuadros cuidadosamente seleccionados. Antiguos jarrones de cerámica, lámparas retro y candelabros de metal agregan encanto y carácter al espacio. Los cuadros con ilustraciones botánicas y paisajes bucólicos dan un toque artístico a las paredes, creando una sensación […]
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