Ética e integridad por bandera.

Esta semana aparecía en algunos medios la noticia de que Caixabank S.A. había decidido que parte de sus empleados  hiciera un curso sobre la aplicación de su Código Ético, quedando de cierto modo "certificada"  la integridad de estos en caso de aprobar un test.

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Si bien a primera vista, como accionista, pudiera parecerme algo positivo, tengo que reconocer que hay ciertos aspectos que despiertan cierta desconfianza al respecto, llevándome a no celebrar en exceso esta noticia sino más bien a que se despierte en mí cierta suspicacia.
¿Se puede certificar la integridad de una persona por la realización de un curso o por vía test?
Imaginemos que soy un carterista y que la policía me preguntara en un test "Si estuviera usted en el autobús y tuviera la oportunidad, ¿le robaría usted la cartera a otro pasajero?" No le voy a preguntar si cree que contestaría "Sí" o "No", simplemente le propongo que reflexione sobre qué valor le daría a un "No" por respuesta.
Lo planteo de otro modo. Si lográramos que gran parte de los políticos y cargos públicos que actualmente están siendo procesados por corrupción tuvieran que responder a un cuestionario tipo test sobre su integridad, ¿cree usted que alguno lo suspendería? La repuesta es muy sencilla... lo que se dice ser y lo que realmente se es no siempre coinciden, de igual modo que el saber lo que es correcto y el hacer lo correcto son cosas totalmente diferentes. Por ello, para averiguar si los empleados de Caixabank S.A. son íntegros, deberíamos partir de la base de analizar sus actos, más que dar por buenas sus propias afirmaciones en cuanto a la integridad de ellos mismos.
Entonces ¿qué debe pretender lograr Caixabank con este test?
Esto es lo que más me preocupa como accionista y más desconfianza me genera. Si realmente se trata de fomentar la integridad o ponerla a prueba, me temo que la prueba que han escogido probablemente sea demasiado fácil como para que realmente este sea el objetivo.
Permítame que me sirva de un ejemplo para explicarme. Imagine que usted se encuentra en una fiesta y se le presenta una persona que quiere hacer negocios con usted. Tras el intercambio de preguntas de rigor, éste señor le empieza a explicar por activa y pasiva lo honesto e íntegro que es, haciendo verdaderos esfuerzos para convencerle al respecto. ¿Le creerá o desconfiará? ¿Qué importancia le da usted a que uno mismo de fé de su integridad? Es más, imaginemos que usted quiere salir de dudas y averiguar si se trata de una persona honesta o no. ¿Acaso no concedería más importancia al examen de sus actos? Y, en caso de que estos denotaran una falta de integridad y honestidad relevantes, ¿qué pensaría de este señor?
¿Podemos analizar los actos de Caixabank S.A. para averiguar si sus directivos se comportan de forma íntegra y honesta?
Por supuesto que sí. De hecho, este análisis forma parte del espíritu de este blog. Un accionista inteligente no debería invertir a la ligera en una compañía si no confía mínimamente en la integridad de sus directivos. Por eso, analizando actualidad y "tirando" de hemeroteca, desde este blog se intentará analizar la verdadera esencia de Caixabank S.A. para que los accionistas tengan más información al tomar sus decisiones.
¿Monja o prostituta? 
No se alarme, sólo me sirvo de un ejemplo. Dejando a un lado consideraciones éticas al respecto, es imposible ser ambas cosas a la vez. Mientras que es más que posible que una prostituta se acueste con usted, una monja no lo haría y, es más, de hacerlo jamás le cobraría por ello. De hecho, el hacer ambas cosas le haría perder su condición de "monja" para pasar a tener la de "prostituta". No hay vuelta de hoja, por lo que, al igual que en este ejemplo, habrán ciertos aspectos en los que sólo se podrá interpretar "blanco" o "negro" sin que los "grises" tengan cabida, dificultando que nadie pudiera huir al terreno de la ambigüedad.
En esta línea, el análisis que se pretende hacer es de lo más sencillo, contrastando lo que oficialmente afirma la entidad ser, con lo que se desprende de sus actos, esperando poder determinar mejor cuál es el comportamiento real de la entidad y lo que un accionista puede esperar de ella.
Por ello analizaremos los siguientes aspectos:
- Caixabank S.A. en la prensa. ¿Los medios pueden publicar libremente noticas sobre Caixabank o éstas han de pasar algún tipo de censura previa?
En situación de normalidad, deberíamos encontrar tanto noticias positivas como negativas en la mayor parte de medios. Resultaría preocupante observar que sólo tiene repercusión mediática un tipo de noticias ya que podría sugerir que alguien manipula al público para ofrecer sólo una "realidad".
- Caixabank y la justicia. El comportamiento de la entidad en los diversos tipos de procedimientos judiciales en los que se puede ver envuelta y el estudio de las resoluciones judiciales de los mismos, partiendo de la base de dos aspectos importantes:

 1. El simple hecho de verse envuelto en un procedimiento judicial no presupone nada malo en absoluto sino que sólo denota una discrepancia que da origen a dicho procedimiento. 

 2. Cualquier sujeto jurídico tiene derecho a defender sus intereses legítimos, por lo que las acciones jurídicas de Caixabank S.A. deberían ser interpretadas bajo el ámbito del ejercicio de dicho derecho salvo cuando una resolución judicial muestre una clara mala fe procesal.

En este sentido, las resoluciones judiciales facilitarán muchísima información sobre los actos -no "palabras"- de Caixabank S.A y facilitará el verificar si la entidad se comporta realmente tal y como afirma.
En definitiva, considero que un sencillo análisis de este estilo puede dar frutos importantes en aras de aclarar y despejar posibles dudas en cuanto a lo que es realmente esta entidad. Además, lo mejor es que cualquiera puede realizarlo y sacar sus propias conclusiones. Incluso cualquier accionista puede acercarse a cualquier sucursal para investigar por él mismo, aunque en su faceta como cliente, y determinar, por ejemplo, si existen buenas o malas prácticas bancarias, si la persona que nos atiende conoce perfectamente el producto que nos ofrece, etc...
¿Es necesario un análisis de este tipo?
Considero que, aunque no hubieran motivos para desconfiar, cualquier inversor diligente opinaría que nunca está de más.
Tantos premios y certificados en los últimos años podrían tener un significado muy positivo como muy negativo, especialmente en el caso de que denotaran que la Entidad hace esfuerzos importantes en controlar la imagen que se tiene de ella o en mostrarse de un modo determinado. Partiendo de la base de que cualquiera es libre de mostrarse como quiera y que resulta normal (o aceptado) que una compañía muestre su mejor cara, hay que hacer una pequeña consideración al respecto. Si al accionista se le promete integridad, honestidad y diligencia... el accionista debe esperar que los actos de Caixabank S.A. denoten integridad, honestidad y diligencia sin excepción. En caso contrario al accionista se le podría estar engañando y éste estará infravalorando los riesgos que corre al invertir en la compañía. Por desgracia estos riesgos, de difícil medición, pueden suponer pérdidas tan inesperadeas como importantes, al igual que las que se derivaron de la salida a bolsa de Bankia o de las que se puedan derivar de la liquidación de Banco Madrid, por lo que no deben ser ignorados.
A modo de conclusión, considero que "la integridad de Caixabank S.A. debe estar fuera de toda duda", por lo que entiendo que resulta beneficiosa la aparición de iniciativas como la que motivó el nacimiento de este blog para que velen y comprueben que sea así en todo momento.