"El artista es sustituible, el curador, como los dictadores, no lo es."*
Robert Bramkamp, es un cineasta, guionista, docente y autor alemán, que ha realizado varios cortos y un par de largometrajes centrados en nuevos medios, lenguajes y estructuras cinematográficas o audiovisuales. Este alemán que estudió cine y sobre su propio país (Estudios Alemanes), se ha ganado un puesto dentro de los terrenos del cine experimental, las vanguardias alemanas y los lenguajes transmediáticos. Bramkamp, que ha colaborado con artistas visuales -instalaciones y videoarte-, además de su labor como docente, ha sido invitado a diversas cátedras de cine, tanto en su Alemania natal como en los Estados Unidos.
Sus percepciones sobre el arte, y los nuevos medios quedan reflejados en su última obra Art Girls, la cual tuvimos la oportunidad de ver en el
Festiva de Eurocine de este año, bajo la categoría de Arte & Cine.Escrita en conjunto por el propio Bramkamp y por Reimund Spitzer, esta obra crossmedia, con ciertas dosis de humor, drama y especulación, nos acerca a tres mujeres artistas de Berlín, que en una exhibición de arte colaborativa financiada por Biotech, nos llevarán a una nueva era, a una evolución a partir de sus propias obras de arte.Con un guión entre confuso, seudoartístico y experimental, la obra se va manifestado en diversas relaciones entre el arte contemporáneo, su capacidad de cambio y una especie de evolución (seudocientífica) a partir de éste. Este viaje interior nos imbuye en el concepto de la evolución a través del arte - para unos como dictadura, para otros como utopía-, evolución que será dispuesta, en la piel de la débil y fracasada artista Nikita Neufeld, de la fría Una Queens y de Fiona Davinci, quienes se enfrentarán, enamorarán y compartirán con los gemelos Maturana, científicos devenidos en galeristas, en nombre de la firma Biotech, los cuales sacarán lo mejor y los peor de estas mujeres.Aunque a nivel técnico no hay mucho por destacar, igualmente hay un buen trabajo de fotografía por parte de Sebastian Egert, lo mismo que a nivel de montaje y dirección de arte, los cuales van perdiendo fuerza por el exceso en ciertas concepciones artísticas, ante todo por la música de Max Painters y Martine Roberts, música con ecos electrónicos, que si bien están acorde al estilo de la película, también afectan la dinámica de ésta. Sin embargo, el mejor trabajo, pero el que más afecta la calidad de la obra, son sus efectos por computador, que se manifiestan de forma errática y casi artesanal en algunos puntos, y en otros son casi que la parte esencial de la obra, acercándose al videoarte y al mismo videoclip, como lo son las puestas en escenas de las artistas y cuando las obras "cobran vida".Frente al tema de la actuación, es difícil concordar, si éstas son buenas o en el peor de los casos, ridículas, porque en cierta forma el director trata de invocar esos elementos de exageración para ciertas puestas en escena, donde los estereotipos y elementos hiperbólicos, relacionados al performance y al arte contemporáneo - y sus múltiples subestilos- salen a flote; tal vez los más destacados, serían Peter Lohmeyer, interpretando a los gemelos Valderrama y el papel Megan Gay, quien no sólo funciona como la fría artista casada con su propio mecenas sino por la misma presencia de ésta.
Segunda película que veo en Eurocine con una narrativa crossmedia, -la anterior la había visto el festival anterior-, sin embargo, en este caso, no sólo es su fallido guión sino su propuesta, las que van desmoronando, en sus reflexiones, puestas en escena, seudoarte y demás, que no acaban de encajar como narrativa, y parece más bien una mescolanza de ideas, que no van a ningún lado. Aún así, a pesar de su errática puesta en escena, tiene cosas interesante relacionadas a lo visual, teorías sobre el arte, los curadores y demás, pero en definitiva no pasa de esos limites.
Montaje Paralelo: Arte contemporáneo Web: http://artgirls.eu/
*http://revistareplicante.com/reflexiones-sobre-arte-contemporaneo/