Supongo que debo avisar de que este blog es LGTBI “friendly”… que viene a significar que la persona que lo escribe (osea yo) lo soy. Así desde el primer párrafo sabes qué puede esperar y si quieres cerrar la ventanita y hacer otra cosa. También soy feminista, por si eso te da más pistas.
También aviso que esta pregunta que me hago no es algo que me haya surgido en la cabeza sino que lo he visto por redes sociales y eso me ha hecho preguntarme cosas.
Hay dos cosas que han pasado en la actualidad para que las redes se hayan llenado de este tipo de contenido estos días:
- La consulta pública previa a la elaboración de un proyecto normativo consistente en una ley para la igualdad plena y efectiva de las personas trans. Hay un documento PDF que han elaborado para informarse al respecto.
Ya está activo el trámite de consulta pública previa a la elaboración de un proyecto normativo consistente en una ley para la igualdad plena y efectiva de las personas trans. #OctubreTrans
— D. G. Diversidad Sexual y Derechos LGTBI (@LGTBIGob) October 30, 2020
Aportaciones hasta el 18 de noviembre
https://t.co/LFvY0AkuDV pic.twitter.com/77uBhjBYUl
- Una mujer en el programa de televisión Pasapalabra trajo a colación que su hijo mayor es un niño trans. Te dejo el tweet con el vídeo a continuación por si te interesa verlo:
(1/2) Este es el sensacional y necesario mensaje que nos ha querido transmitir Sara, una persona enorme con dos hijos maravillosos. Ella y toda la infancia trans tienen nuestro completo apoyo . https://t.co/DyOMSfTBlE #Pasapalabra121 pic.twitter.com/Zj4ch4uX9T
— Pasapalabra (@PasapalabraA3) October 30, 2020
¿Existe la infancia trans?
Pues como persona que ha vivido una infancia cis y que no conozco a nadie que haya pasado por una infancia trans (o que me lo haya querido contar) no puedo contestar a esa pregunta.
Si has venido a este post para que responda categóricamente con una afirmación o negación lo lamento mucho. Parafraseando al gran Ángel Martín: “no tengo ni puta idea”.
Sé que no puedo negar la existencia de algo solo por no haberlo vivido o visto con mis propios ojos. Y creo que mucha gente estará de acuerdo con esto. No he visto nunca a Hitler pero sin duda existió y tampoco he visto que la tierra es redonda pero eso no me ha convencido del terraplanismo.
En muchos ámbitos jugamos con las “pruebas” que nos enseñan otros y con sus testimonios para hacernos una idea de algo. En la historia nos tenemos que fiar de lo que escribieron los ganadores de las guerras (siempre ganan los buenos), en la actualidad es mejor revisar varios periódicos si quieres hacerte una idea global de lo que ocurre.
Como persona cis todo mi conocimiento adquirido sobre la transexualidad o las personas transgénero es de segunda mano. Y debo admitir con algo de vergüenza que además es de adquisición reciente.
Por esto no me siento en el lugar adecuado para contestar a esta pregunta, pero sí tengo ideas y reflexiones al respecto, además de muchas otras preguntas que es de lo que realmente va este post.
La comunidad LGTBI y el feminismo.
Hasta hace poco yo no entendía cómo se podían separar estas dos ideas, pero entonces apareció (o descubrí) lo que se ha llamado feminismo radical. En mi cabeza cualquier cosa que tenga que añadir radical a su ideología no puede ser algo bueno. Y esto es un prejuicio mío fruto de mi experiencia personal, no un alegato.
Por lo visto las feministas que han decidido radicalizarse han entrado en conflicto con la comunidad LGTBI a causa de la transexualidad. Ponen en duda (o quizás sea más correcto decir que niegan) que una mujer trans deba ser considerada como mujer y por tanto su papel en la lucha feminista es de segunda. Y esta es la lectura que hago yo de la actualidad, quizás me equivoque al sacar estas conclusiones pero básicamente es con lo que me encuentro una y otra vez.
No obstante he leído la opinión que estas personas (feministas radicales) sobre la infancia trans y la verdad es que entiendo que hay muchas cosas que generan dudas y preguntas.
Yo creo que tener dudas y preguntas es algo muy razonable cuando no conoces o entiendes algo. En ese caso lo que yo hago es ir a investigar y leer sobre el tema. Y sinceramente os lo digo:
Me he vuelto un poco loca con la terminología. Hay todo un mundo enorme detrás de las siglas LGTBI.
Como yo misma no tengo claros muchos conceptos que se manejan en este tema lo que hago es seguir aprendiendo y formándome al respecto. Leo muchos artículos de diferentes orientaciones, sobre todo los que sé a ciencia cierta que exponen puntos de vista contrarios para tratar de formarme una idea propia al respecto de todo lo que implica la transexualidad.
Una madre LGTBI “friendly” educando…
Loki llegó a casa el curso pasado preguntando por su otra mamá y yo me quedé a cuadros. Le dije que solo se podía tener una mamá y que yo era la suya (un poquito de ego herido igual sí que hubo en esta afirmación). Entonces él me dijo que no porque una niña de su clase tiene dos mamás. Me di cuenta de mi error y reculé. Yo estaba entendiendo madre como gestante y él me hablaba de un término más amplio. Aquí la de la mente cerrada era yo.
Así que le dije que era verdad lo que él decía y que me había equivocado. Le conté que había muchas familias distintas y que a él le había tocado una que tenía un papá y una mamá. Le dije que él tiene solo una tía y hay niños que tienen muchas tías y tíos y primos… cada familia es diferente. A él esto le pareció estupendo y siguió con su vida.
Me quedé contenta porque logré que entendiera las cosas desde una perspectiva más amplia. Y no sé si eso es feminista, radical o LGTBI. Pero son las ideas que a mí me gustaría que formaran su mundo.
Pero a la vez me doy cuenta de que por mucho que intento tener una mente abierta y trato de que Loki también la tenga le enseño cosas que van en contra de esa idea. Mi hijo te dirá sin pelos en la lengua que los niños tienen pene y las niñas vagina.
Y yo sé que tiene 4 años y si hay cosas que los adultos con capacidad e información disponible no son capaces de entender más complicado es para él captar las zonas grises de según qué cosas.
En su mundo hay colillas y chichis… todo se divide en dos. O eres de un equipo o eres del otro. Y por mucho que él tenga desde hace bastante un carrito de limpieza, muñecas, vestidos o una cocinita no puedo evitar exponerle a esta bipolarización de la sociedad.
¿Cómo te lo explico? Los grises…
Hace unos meses una de las personas a las que sigo por twitter puso este mensaje:
Te quiero mucho niña de la mesa de enfrente que no para de girarse a ver si soy una chica o un chico con solo un pelín menos de discreción que su madre.
— Haizea M. Zubieta (@hm_zubieta) August 6, 2020
Esta situación la he vivido como la madre del niño. Y debo asumir que es posible que incluso haya sido esa persona que mira de reojo haciéndose la maldita pregunta de si esa persona será una chica o un chico. Mis más sinceras disculpas a las personas que se hayan sentido mal por mi comportamiento, estoy intentando muy fuerte cambiar y educar a la siguiente generación para que sea mejor que yo.
Estamos en ese punto en el que Loki señala a la gente por la calle y hace comentarios como: mira mamá esa señora ha cruzado en rojo, mira mamá ese señor no lleva mascarilla. A veces también saluda a la gente desconocida cuando nos cruzamos con alguien.
Si nos encontramos con alguien que no encaja en ese mundo dividido en dos él se cuestiona las cosas y es normal que lo haga en voz alta y delante de la persona en cuestión porque no ve que puede hacer daño.
Así que he intentado explicarle que lo que él ve puede parece una cosa y ser otra. Papá tiene el pelo largo y es un chico. Mamá lleva pantalones y es una chica. No me veo capaz de explicarle de modo que entienda que no hay que polarizarlo todo así que me centro en que no juzgue en base a lo que ve.
La zona gris: feministas, sexo y género
Creo que el mundo no se reduce a hombres y mujeres, que hay una zona gris en la que las personas pueden vivir sin decantarse por ninguna de las dos opciones.
Según tengo entendido ahí se encontrarían las personas que se denominan no binarias. Pero esto de lo que hablo no sería considerado transexualidad o transgénero.
Trans sería una persona que está en un lado (hombre o mujer) y quiere moverse al otro (transicionar). Y aquí hay un amplio campo de posibilidades, desde personas que son trans y se sienten bien con lo que ven en el espejo a otras que no.
Si la persona quiere transicionar en el aspecto físico normalmente suele pasar por un tratamiento médico y en ocasiones también operaciones que como cualquier tratamiento quirúrgico tiene sus consecuencias para la salud.
Las feministas radicales que niegan la infancia trans se basan (por lo que he entendido) en que el sexo es biológico (genital) y el género una serie de roles (concretos). Y que lo que genera el malestar no es la parte física sino esos roles.
No estoy segura de mi posición respecto al último párrafo porque como soy cis no sé qué me molestaría si fuera trans. No puedo decirle a otra persona lo que realmente le molesta o le genera malestar. Igual que es complicado que los hombres sean plenamente conscientes de lo que puede llegar a ser molesto para una mujer.
Creo que hay peques que sienten que algo no encaja en su vida. Yo no soy nadie para decirle a esa pequeña persona qué siente o cómo estaría mejor. Si Loki quisiera transicionar lo apoyaría al 100% pero me preocuparía por los efectos secundarios y por si se arrepiente a la larga de estas decisiones.
Así que… ¿existe la infancia trans?
Sigo sin tener ni idea. Creo que es muy difícil educar de forma que los peques encuentren su identidad propia sin influirles en absoluto.
Yo de pequeña nunca me planteé cuestiones de género o sexo. Pero tal vez eso fue así porque todas las piezas encajaban. Quizás sólo nos planteamos cosas cuando algo nos molesta y entonces nos lo cuestionamos.
En mi adolescencia tenía ideas muy machistas y me sentía completamente a gusto con ellas. Si ocurría algo que ponía a la mujer por debajo del hombre a mi no me rechinaba porque encajaba con mis piezas.
Es ahora que veo las cosas de otra forma cuando las mismas piezas que antes encajaban ahora no lo hacen. Me molestan y lucho para que las personas que están pasando por su adolescencia se cuestionen cosas.
No sé si ambas cosas son equiparables. Pero soy consciente de que yo me sienta a gusto con algo y otra persona no. Y que los peques, aunque no tengan vivido lo que yo pueden enseñarme cosas que yo desconozco.
Así que no sé si existe o no una infancia trans, pero sí sé que quizás los adultos cis no somos quien para decir a los demás que su experiencia vital no es legítima.