Este video nos ha resultado muy interesante, se trata de un experimento sobre el comportamiento humano ante un reparto poco equitativo. Se sometió a un grupo de 20 niños a un estudio en el que se trataba de determinar si compartirían la comida, el resultado fue abrumador, todos compartieron la comida. El experimento se ha realizado bajo el título Experimento Comparte, iniciativa impulsada por la organización Acción contra el Hambre, con ella pretende mostrar que la lucha contra el hambre es más sencilla de acometer si todos compartimos un poco.
El gesto de compartir es algo natural desde la infancia, recordemos por ejemplo el post El sentido de la justicia en los bebés, algo que aparece cuando los pequeños todavía no han aprendido a decir 10 palabras. A través de su lectura podíamos saber que los bebés se sorprenden cuando el reparto de alimentos entre dos personajes que se muestra en un vídeo, no es equitativo. Compartir es actualmente un gesto que puede salvar a millones de niños del hambre, pero para ello es necesario que los adultos adopten el comportamiento que tienen los niños en el Experimento Comparte.
Resulta sorprendente saber que se producen alimentos para alimentar con holgura a toda la población mundial y sin embargo, cientos de millones de personas padecen el hambre. Al respecto nos gustaría recomendar la lectura del post 1.300 millones de toneladas de alimentos se tiran a la basura, son los países industrializados los que más alimentos desperdician, cantidad que no puede ser obviada y menos sabiendo que con estos alimentos se evitarían muchas muertes.
Experimento Comparte pretende concienciar a la población para que comparta un poquito y evitar así la desnutrición y sus consecuencias fatales, sin embargo, sería interesante que fueran los gobiernos, instituciones y entidades financieras quienes vieran el vídeo y tomen conciencia, ya que son los que verdaderamente pueden hacer mucho más para luchar contra la desnutrición y el hambre.
En el vídeo podemos ver varios niños de diferentes edades en pareja, que se sientan en una mesa y frente a ellos tienen un plato cubierto que no deja ver su contenido, al destaparlo ambos se sorprenden, en un plato hay un sándwich y el otro está vacío. Resulta enternecedor cuando de forma espontánea, la mitad del sándwich es entregado al niño que tiene el plato vacío, da igual si el sándwich se presenta cortado o completo. Esa solidaridad infantil la perdemos con el paso de los años, parece que la condición adulta nos vuelve egoístas.
La verdad es que la campaña llama la atención e invita a que realicemos una reflexión, podemos evitar que mueran millones de niños con un simple gesto, compartir. Puedes conocer más detalles de la acción a través de la página oficial de Experimento Comparte.
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