Es en la Fundación Vallpalou (Lleida) creada en el 2008 por la pintora Vallpalou con el fin de promover el arte contemporáneo en la ciudad de Lleida, dónde en estos momentos se acoge la exposición del artista Josep Grau-Garriga titulada “In Memoriam” hasta el 3 de marzo.
Esta singular exposición, de momento, sólo se podrá ver en Lleida, ya que no se celebrará ninguna otra exposición del artista hasta 2015, para la cual se está preparando una importante retrospectiva que se celebrará de manera simultánea en España y Francia.
La exposición “In Memoriam” une el textil con el espíritu cultural de la ciudad y es la exposición más importante que se ha realizado del artista en la ciudad de Lleida.
“In Memoriam” consta de una veintena de obras de gran formato, entre tapices y pinturas textiles, fechadas principalmente en los años 80, seleccionadas por Josep Canals, comisario de la exposición.
La exposición “In Memoriam, está dedicada a Grau-Garriga que murió en Francia en el 2011 a los 82 años de edad.
Entre las obras que se exponen, destaca el tapiz titulado “Gestació” (Gestación), hecho en lana y yute con un tamaño de 220 x 180 cm del año 1980, obra propiedad del coleccionista Joan Mateos, amigo del artista.
También se podrán ver obras creadas por el artista en los años 60 y 70 en la Casa Aymat, sede de la Escuela Catalana de Tapiz y estudio del artista, lugar dónde trabajó al lado de artistas como Miró, Tàpies o Guinovart.
El artista, nacido en Sant Cugat del Vallés (Barcelona) en 1929, y que alcanzó con el transcurso del tiempo una solidez tan remarcable que su obra es hoy un hecho referencial para captar la intensidad de la búsqueda plástica contemporánea catalana, en el resto del Estado y también en el extranjero.
El artista es reconocido como el artífice de la renovación de los conceptos en la elaboración del tapiz y es considerado el principal creador de la tapicería contemporánea.
Inspirado por el artista francés Jean Lurçat, con el cual colaboró, que procedió de forma similar a la elaboración de la tapicería actual, Grau-Garriga va más allá y no sólo reduce la coloración de los tapices a la de los colores esenciales de las fibras que usa, sino, que además pone de manifiesto la calidad material de estas fibras y no sólo las trabaja en el simple plano bidimensional del entramado sino que las dota de dimensiones volumétricas reales, sustituyendo la tapicería clásica por una totalmente tangible y táctil que hace apreciar las cualidades del soporte.
¿Pero cuál es la intención que organizaba todas esas fibras y materias? La referencia plástica de las obras no podía ser otro que el compromiso político y social del cual con voluntad o sin del artista está siempre presente. Ya los títulos advierten al observador sobre a lo que aluden sus juegos plásticos; pero quien observa con cierta sensibilidad se puede dar cuenta inmediatamente que esas piezas tan trabajadas y formalmente tan arriesgadas tanto en materia como en color y construcción, elaboradas mediante un collage expresivo, responden a la plasmación de los hechos que constituyen la cotidianidad de la vida, no solo del artista si no también de todos los ciudadanos que se encuentran en su circunstancia ideológica y económica.
En Saint-Maruthin-Sur-Loire (Francia), dónde el artista vivió los últimos 20 años de su vida y dónde está enterrado, se inauguró un mural suyo en la iglesia de la población. El mural, que dejó inacabado, sirve como testimonio de su ultima creación, obra que pensando en el pacifismo tituló “La puerta de la paz”.
Aún así, los tapices de Grau-Garriga tienen también ese factor teatral, ya que muchos de ellos estuvieron elaborados con la intención de indicar, marcar o delimitar un espacio donde el espectador puede vivir y convivir con la obra.
Son las obras de Grau-Garriga construcciones de nuevos símbolos y intenciones y destaca por la utilización de materiales básicos como el algodón, el lino, la lana, la seda y crea nuevos collages con espacios vacíos, agujeros ópticos y reales.
Los hilos y las fibras, la cuerda, la longitud y el grosor variable a intención o aportado por el azar, crean ámbitos y dimensiones plásticas sorpresivas.
Colaboran a esta sensación visual y táctil, un conjunto de retales de ropa y otros enseres familiares cargando la obra de pequeñas sensaciones.
Remachada la intencionalidad creadora por el uso pleno, fragmentario o troceado de listones de marcos d’encuadre, el cuadro dentro del cuadro.
Sin duda es una gran oportunidad para contemplar una exposición tan amplia de la obra de Grau-Garriga ya que hasta dentro de unos años no se volverá a hacer una exposición de estas características.
Página web de la Fundación Vallpalou: www.fundaciovallpalou.org
Bibliografía: Catálogo de la exposición “In Memoriam”.
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