Revista Ciencia
Os voy hablar de mi querido extintor, alguno de vosotros sabréis mi relación amor-odio con dicho artilugio. Y como no, se merece una entrada en este blog. Que la imagen no os confunda así no se hace el agente extintor, solamente es la famosa mezcla Mentos + Coca-Cola...
Como todos sabéis el extintor se caracteriza por ser un cilindro metálico cerrado a presión que contiene de 1 a 250 kg de agente extintor, se lo que estáis pensando el de 250 kg lo va a mover su...Existen diferentes tipos de extintores según su agente extintor. Pero me centraré en los mas comunes, los que tenemos todos en las escaleras de casa o en los parkings. Me refiero a los de CO2 (Nieve Carbónica o Anhidrido Carbónico) y a los de polvo químico seco. Los de CO2 se utilizan en fuegos tipos B (líquidos inflamables, petroleo, gasolinas, aceite, pinturas y algunos plásticos) y C (incendios eléctricos). El CO2 se encuentra cerrado a presión dentro del extintor, cuando lo abrimos y dirigimos la manguera o boquilla a la base de las llamas el CO2 sale y desplaza al aire dejando el fuego sin oxígeno y así apagando las llamas.
En cambio el de polvo químico seco se trata de una mezcla de fosfato monoamónico al 75% (muy utilizado como abono y muy estable), preparado para fuegos de clase A (combustibles sólidos) B y C es el típico que se encuentra en casas y deja un polvo blanco después de usarlo, que es completamente soluble en agua. Su funcionamiento consiste en tapar el producto en llamas con el fosfato monoamónico impidiendo así la entrada de oxígeno y apagando el fuego, ojo los fuegos de mas de 190ºC descomponen el fosfato monoamónico en nitrógeno y amoníaco y también ojo al echarlo sobre cal o hidróxido de sodio produce grandes cantidades de amoníaco así que cuidado al respirar.
Espero que nadie tenga que utilizarlo alguna vez, pero ahora ya sabéis mas sobre ese cilindro rojo que tenéis colgado en la pared y que pasamos continuamente delante de el sin prestarle atención.