En la medicina y psicología modernas la adicción se considera una condición física y mental que consiste de cinco etapas: 1) Deseo imparable por alguna sustancia, actividad o relación humana 2) Uso compulsivo y frecuente de las anteriores 3) Necesidad de aumento de las dosis para lograr el mismo efecto (Tolerancia) 4) Síndrome de abstinencia o sintomática sufrida al no consumir el objeto adictivo 5) Problemas en varias áreas de sus vidas.
Se acepta como adicción cualquier actividad o consumo que el sujeto no pueda controlar que lo lleve a conductas compulsivas y perjudique diversas áreas de su vida -física, psicológica y/o social.
Los objetos de la adicción no tienen porque ser drogas "pesadas" y son más variados de lo que se supone: Adicción a drogas diversas (legales e ilegales) incluyendo al alcohol y el cigarrillo. Adicción al trabajo o trabajocolismo; a ciertas personas (codependencia); al sexo; a las compras; al juego (ludopatía); a la pornografía; a la televisión; al internet o ciber-adicción (redes sociales incluidas); nuevas tecnologías (tecnofilia); comidas rápidas, etc.
Lo que define la adicción no es la sustancia, actividad o relación sino la dependencia física y/o psicológica y las conductas compulsivas y maníacas que las caracterizan y pueden ser peligrosas.
El actual y permanente "enchufe a la tecnología" es buscador de placer aún a costa de hipnosis o por principio del Nirvana. Supongo que el estado nirvánico (Hipnoideo) que se alcanza en el "estado adictivo" explicaría los grandes esfuerzos y sufrimientos que se pasan por alto: como los alcohólicos que desprecian cualquier malestar y dolencia con tal de mantener su embriaguez (Hipnosis)
Buceando en el diccionario: ..." Principio del Nirvana" Término propuesto por Barbara Low y recogido por Freud para designar la tendencia del aparato psíquico a reducir a cero o, por lo menos, a disminuir lo más posible en sí mismo toda cantidad de excitación de origen externo o Interno. El término "nirvana", difundido en Occidente por Schopenhauer, está tomado de la religión budista, en la cual designa la "extinción" del deseo humano, la aniquilación de la individualidad, que se funde en el alma colectiva, un estado de quietud y felicidad perfectas. En Más allá del principio del placer (Jenseits des Lustprinzips, 1920), Freud, recogiendo la expresión propuesta por la psicoanalista inglesa Barbara Low, enuncia el principio de nirvana como una "[...] tendencia a la reducción, a la constancia, a la supresión de la tensión de excitación interna". Esta formulación es idéntica a la que Freud da, en el mismo texto, del principio de constancia, e implica, por consiguiente, la ambigüedad de considerar como equivalentes la tendencia a mantener constante un cierto nivel y la tendencia a reducir a cero toda excitación (para la discusión de este punto, véase: Principio de constancia). Con todo, no es indiferente observar que Freud introduce el término "nirvana", con su resonancia filosófica, en un texto en el que se adentra ampliamente en un camino especulativo; en el nirvana hindú o schopenhaueriano Freud ve una correspondencia con la noción de pulsión de muerte..."
Aunque existe un sustrato químico cerebral y neurotransmisores que puedan explicar la conducta de la búsqueda y del "anhelar" (craving) del adicto, el estado de quietud y ese paraíso y felicidad perfectas que resuena como "pequeña muerte" podría ser parte de la explicación de los "estados adictados"