OBRAS
FÁBRICA DE CAFÉ MONKY EN MADRID · 10/12/2015
Dentro del grupo de arquitectura moderna desaparecida en Madrid, donde se incluyen casos como “La Pagoda” de Miguel Fisac, el frontón Recoletos de Secundino Zuazo o las piscinas La Isla de Luis Gutiérrez Soto, también figura la malograda fábrica de café soluble Monky (1960-1962) para la empresa Cogesol S.A. en la carretera de Barajas (Nacional II), diseñada por Genaro Alas y Pedro Casariego y demolida en 1991 víctima de la especulación inmobiliaria. Al igual que el almacén de coches para SEAT de César Ortiz Chagüe y Rafael Echaide en Barcelona, construido pocos años antes, uno de los objetivos primordiales del proyecto fue el de exhibir su maquinaria como estrategia comercial aprovechando su enclave a pie de carretera. De la misma forma que el anterior, su muro cortina, a pesar de rudimentario, constituyó uno de los primeros casos en España.
Los paramentos de vidrio y acero en los edificios de maquinaria destacan drásticamente frente a los muros de ladrillo cerámico del resto de edificios. Fuente: Revista Arquitectura COAM, n.º 55.
Extracto de la memoria del proyecto:
El proyecto de esta fábrica fue pensado de acuerdo con las indicaciones de la sociedad propietaria para que la edificación sirviera de propaganda, es decir, fuera espectacular. El terreno elegido para su emplazamiento permitía esta pretensión, pues su situación es magnífica y sobre todo viniendo de Barajas hacia Madrid se enfila desde una recta muy larga.
Así planteada la cuestión, llegamos a la solución de hacer dos cuerpos acristalados que permitiesen la visión de la maquinaria: uno la torre donde se sitúa parte de la misma y concretamente un atomizador cilíndrico de acero inoxidable de cerca de 20 m de altura, y otro, más bajo, donde van las baterías de extracción.
Perspectiva de la torre con el atomizador cilíndrico. Fuente: revista Arquitectura COAM n.º 55, 1963.
Esta diafanidad la conseguimos cerrando estos cuerpos con un muro cortina sin pretensiones, pues no teníamos que luchar con los problemas que tales muros crean (aislamiento, condensaciones, etc.), dado que la fábrica es semiautomática y su misión es de cerramiento y protección de la maquinaria. Los materiales del muro son exclusivamente vidrio y placas de fibrocemento.
Siempre se pensó que la torre debería situarse lo más próxima a la carretera, dentro de lo prescrito por las ordenanzas (40 m) y únicamente fue motivo de discusión si su eje más largo debería ser perpendicular o paralelo a la carretera. Llegamos a la conclusión de que al ser perpendicular las zonas o tramos de la misma desde donde se dominaría ampliamente serían mucho mayores. Teniendo en cuenta que sería vista desde automóvil y a velocidad nos pareció muy importante esta mayor amplitud del campo de visión. El resto de los edificios: almacenes, silo y oficinas se trató de manera mucho más cerrada, con muros de ladrillo a cara vista.
Portada de la revista Arquitectura COAM n.º 55, 1963.
Bibliografía:
- ORTIZ-ECHAGÜE, César (1965). «Edificio industrial en Madrid». En: La Arquitectura Española Actual. Madrid: RIALP, 1965 – pp. 60-63.
- «Fábrica para Cogesol, S.A.». En: Arquitectura. Madrid: Colegio Oficial de Arquitectos; n.º 55, julio/1963 – pp. 2-5.