Tiene el film además su propio tempo, por
tanto, personalidad. Y cuenta una historia. No sé si añadir que cada plano y
cada secuencia son arte. El eje de la película Farón es la pugna entre dos poderes, el político y el religioso
del Egipto del II Periodo Intermedio (1800 a.C. - 1550 a.C.)
Kawalerowicz retrata a los sacerdotes como conspiradores y ambiciosos, capaces
de manipular a un pueblo ignorante, ingenuo y supersticioso. Hoy, todo esto
simplemente tiene otros nombres.
Algunas escenas de batallas de Farón inspiraron escenas de batallas de
la saga Antigua Vamurta. La película
es tan recomendable como una taza de caldo hirviendo en una helada noche de
invierno, que se bate en retirada a 19 de marzo de 2015. Aleluya.

Farón, del polaco Kawalerowicz
