El hecho de que la mafia de turno esté en el poder o no, ami entender no es significativo, ya que los favores (contraprestación) pueden sera priori o a posteriori. Estamos ante algo que se llama nepotismo. Si creemosque esto es algo nuevo estamos equivocados. Esto es tan antiguo como el hombre aunquela palabra es relativamente reciente. Pero eso no va a impedir que seadenunciado por los ciudadanos, a ver si con suerte en 20 o 25 años (fíjate sila tiro larga), estos casos dejen de producirse al menos de forma tandescarada.
¿Somos ingenuos o es que aún nos queda mucho de vasallos?Pero qué cara tienen. ¿Creen que nos chupamos los dedos o saben que vamos acomulgar con ruedas de molino? No se trata de condenar al ostracismo a nadieque por sus propios méritos trabaje para una u otra de estas empresas, no. Elpoder debería saber que aparte de las muchas ventajas, hay que añadir algunosinconvenientes, y este es uno de ellos. De lo que se trata es que resulta muyplausible que se obtenga como cuestión de ventaja obtenida en el pasado, parael momento o para un futuro más o menos inmediato.
Recuerdo el caso de un expresidente de Valencia que nada másacabar su carrera política se “colocó” bien colocado (magnífico y suculentosueldo haciendo poco o nada) en una de estas empresas. ¿Qué clase de favoresantiguos le estaban pagando con ello? También recientemente tenemos el caso deun noble sobrevenido de Baleares que compatibilizó sus “negocios” particularescon cargos en una de ellas. Sé que aunque hay más casos, no los recuerdo (ellossaben que tenemos poca memoria, nuestra nobleza obliga) y aunque podría echarmano de hemeroteca, no es cuestión de eso, no es necesario ser exhaustivo.
Alguien de los nuestros, de los ciudadanos, incluso llega adecir irónicamente que “prometieron empleo y están cumpliendo”. ¿Nos reímos olloramos?
Lo lamentablemente de todo esto además de los favorespúblicos concedidos, es lo burladito que nos lo hacen. ¡Vergonzoso! ¡Seránsinvergüenzas!
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Juan-Lorenzo[email protected]