Amo la Fórmula 1, creo que desde que mi Padre me llevo a un gran premio en el Circuito del Jarama, era un niño y aun tengo en la retina ese a primera escudería española en la Fórmula 1 que fue Iberia Airlines con Emilio de Villota en el Gran Premio de España de 1977. He visto Formula 1 por la TV hasta en aleman, cuando a ninguna cadena española le interesaba su retransmisión. Mi proyecto final de carreara fue un motor.
Ante la ausencia de heroes nacionales, siempre vi este deporte desde un punto de vista muy aséptico (y creo que los sigo viendo así). La F1 era una carrera tecnológica, por encima de todo, donde lo que contaba era la evolución técnica.
Ese tandem pilotos-ingenieros años atras muy equilibrado, fue dando paso a un peso cada vez más grande de los ingenieros. Actualmente un coche de Fórmula 1 tiene más cosas en común con un avión de combate que con un coche de calle. La aerodinámica es una de las piezas clave para entender la Fórmula 1 actual. Pero ese duo se rompió por un trio mas peligroso: llegaron los magnates y sus tejemanejes.
Evento de masas
La F1 ha pasado de ser un deporte para apasionados del motor a ser un evento deportivo para las masas con un enorme potencial de captación de patrocinios. Llega a los cinco continentes a través de televisión, y los derechos mueven centenares de millones de euros cada año.
Ecclestone ha convertido la F1 un negocio lucrativo para su bolsillo, apoyado por Max Mosley, un socio suyo, que acabaría siendo presidente de la FIA también conocida como Federación Internacional de Automovilismo o Fans Íntimos del Alemán o Federación Internacional AntiAlonso, es ésta una organización absolutamente imparcial que simplemente hace un reglamento (extrañamente cambiante cada año) para que su piloto/patrocinador favorito del momento (ahora mismo Vettel/Red Bull) gane carreras de F1, sin importar el resto de los pilotos y su seguridad.
Datos irrefutables
Empieza la temporada y las cosas no le van bien al eje aleman en la F1. Red Bull y Mercedes se comen los neumáticos, no han hecho bien los deberes en pretemporada. El resultado Pirelli, proveedor de los neumáticos de la F1, cambia el compuesto de sus neumáticos duros a partir del GP de España, con un Red Bull como gran beneficiado por una medida que el propio equipo de Vettel pidió de forma descarada y reiterada. Ferrari y Lotus que cuidan mejor las gomas, sale perjudicados.
La escudería italiana, única que ha disputado todos los mundiales de Fórmula 1, ha perdido poder en la élite del automovilismo. Solo así se explica que en pleno campeonato, después de cuatro carreras disputadas, se cambie sobre la marcha un factor para beneficiar a su máximo competidor: el Red Bull de Vettel. Cambiar la ruedas durante el año en beneficio de unos o perjuicio de otros no hace más que adulterar y trampear la competición. Las gomas son estas y las mismas para todos. Si un coche no va bien, es porque sus ingenieros hicieron su trabajo mal. Cambiarlas en mitad de la temporada vicia y adultera el resultado. Esto no es culpa de Pirelli sino de Ecclestone y la FIA.
El resultado de la chapuza: cinco neumáticos estallaron este domingo en Silvertone, y alguno llegó in extremis al final de la carrera. Las gomas de Rosberg desfallecieron en la vuelta de honor, una de Vettel estaba lista y otra de Fernando estaba a punto de caramelo al acabar uno de sus stints. Lo acabó de chiripa. Estamos hablando de poner en peligro vidas señores.
A los Antialonsistas
Como viene siendo habitual cada vez que Ferrari y/o Fernando Alonso decepcionan las redes se han llenado de antialonsistas satisfechos. En el ranking de españoles más odiados por los españoles, Fernando Alonso lleva años sin bajar de los primeros puestos. ¿Extrañado? No te preocupes tiene su lógica.
Yo lo tengo muy claro definitiva lo que fastidia de Alonso es lo poco que le importa obtener la aprobación o el plácet de los españoles. Alonso sabe que en España nada se perdona menos que el intento de asomar la cabeza por encima del resto de la mediocre media. De moverte al margen de ese muy español imbecil, cutre, envidioso, rencoroso y mezquino. Aquí queremos estar en la medía, no destacar, no ser diferente.
En este pais de mediocres (miles de ellos en la clase politica) con audiencias de programas de TV como GH multitudinarias (lo dice todo), con millones de parados, inmerecidos dramas para la mayoría, pero otros que quereis que os diga... neuronas pocas y de adorno. En este país el éxito equivale casí a una sentencia de muerte: la gente frustada e incapaz de tener éxito en su vida, busca su consuelo con el fracaso de los demás.
Yo me quedo con las declaraciones de alguien que algo sabe de esto, el austriaco Gerhard Berger "A veces, surgen pilotos muy especiales: Ayrton Senna fue uno, Michael Schumacher fue otro y Alonso lo es, hay pilotos que pueden ganar el campeonato del mundo sin tener el mejor coche".
Lo que olvida Gerhard Berger que participó en 210 Grandes Premios (el sexto piloto con más participaciones de la historia de la F1), es que ahora no solo hay pilotos e ingenieros. Hay magnates y sus tejemanejes, y si hay que cambiar la ruedas en mitad de temporada se cambian, todo para que gane el eje aleman, auque estallen neumaticos a 300 km/h. Si Gerhard esto ha cambiado y mucho pero bueno me consuela pensar que Vettel nunca estará en una foto como la inferior. En estas fotos solo están los notables, los elegidos, los dioses de los verdaderos apasionados de la F1.
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