¡Feliz Navidad a todos…bueno, a casi todos! Obviamente de mi lista están descartados los políticos, los señores que te dicen grrrchhhssss por la calle y algún que otro error de la naturaleza. Pero la Navidad es un período entrañable, hay que dejar los malos pensamientos a un lado y empezar a pensar de dónde vas a sacar el dinero para comprar los dichosos regalos de compromiso. Habrá algunos que dirán que lo que cuenta la intención y que en tiempos de crisis, un regalo personal vale mucho más que…no sé qué decirte, un iPad…¡Ja! esa mentira está a la altura de ”lo importante es participar” y ”el tamaño no importa”, no importa si no eres tú la que se va a acostar con él.
Los regalos navideños son como los te quiero, si te lo dan ya hay compromiso de devolverlo y en la mayoría de las ocasiones prefieres decirle ”te quiero” a la persona que pensar en un regalo y pagar por él, que jode más. Pero como el espíritu navideño me ha invadido, voy a daros unas cuantas de ideas para que este año quedéis como señores con vuestros familiares, conocidos y demás.
- El manual de ”Cómo No Ser Tan Pedante Cuando Hay Gente Delante”, todos sabéis a quién se lo podéis regalar y si no lo sabéis es que el pedante del grupo sois vosotros. En ese sencillo a la vez que práctico manual enseña que aunque te creas super interesante, especial y único, lo más probable es que no lo seas y que aburras a los demás con tus bobadas.
- Cursillo para superar una relación sin tener que publicar lo triste que estás en twitter cada 10 minutos. Este cursillo consta de un bono de 25 clases donde especialistas te harán ver que no por mucho montar el drama en Twitter esa persona va a volver contigo. Sé que cuesta no escribir una indirecta pero el primer paso es intentarlo.
- Cursillo para mantener una relación sin tener que publicar lo enamorado/a que estás cada 10 minutos. Mis abuelos se llevaron casados 50 años y jamás se dieron los buenos días por Twitter, a lo mejor ahí está el secreto.
- Una buena colleja a ese amigo/a que la necesita como el comer. Puede que en el momento no lo agradezca pero con el tiempo os lo agradecerá y sino pues que os quiten lo ”bailao”.
- No más flores. Sé que queda romántico, que son bonitas…pero no valen pá ná; no puedes ponértelas, no puedes jugar con ellas, lo máximo que puedes hacer es lanzarlas a alguien que te caiga mal y esperar que le pinche un ojo pero ya está. Regalos duraderos y que podamos descambiarlo en la tienda por algo que nos guste realmente, por favor.
- No más marcos con la foto de vuestro novio dentro. A los tios no les gusta eso, a los tios les gusta el sexo, la cerveza y con algo de suerte la literatura y la música. Son simples, regaladles una suscripción al canal Playboy, un cajetín de cervezas y el disco de su grupo favorito y os pide matrimonio.
Espero que con esto ya tengáis más claro los regalos navideños y para despedirme os voy a dejar con la felicitación navideña más espeluznante de la historia, lo mismo te sirve para Navidad que para promocionar Halloween el año que viene.