Quizás la tecnología nos ha hecho más sedentarios, pero no hay duda de que tenemos muchas cosas que agradecerle, sobre todo en el campo de la medicina. En los últimos años los avances han sido enormes y ahora encontramos tratamientos que hace poco no podíamos ni siquiera soñar.
Este es el caso de las férulas realizadas con impresoras 3D que se hacen a medida de cada paciente. Primero se escanea la zona que se debe inmovilizar para después crear una férula totalmente personalizada. Pero aún hay más, porque podremos realizar la rehabilitación de la zona afectada vía app.
Uno de los problemas que presenta el hecho de inmovilizar una zona de nuestro cuerpo debido a una fractura es que, al encontrarse inmóvil, pierde movilidad y masa muscular. Para evitarlo se suele aplicar electroesimulación como un entrenamiento pasivo, pero siempre a posteriori, una vez que se ha retirado la férula o escayola.
Lo que propone la empresa española Exovite es colocar un sensor de electroestimulación en el interior de estas férulas 3D, de modo que la preservación de masa muscular se realice aún cuando llevamos puesta la férula, reduciendo de este modo el tiempo de tratamiento y también los costes.
El dispositivo de electroestimulación podría medir la masa muscular de la zona inmovilizada, enviar la información al equipo médico a través de la aplicación (que llevarían un control a distancia de la recuperación del paciente) y estos evaluarían y decidirían el tratamiento a realizar con la electroesitmulación, que se haría a distancia en el propio domicilio del paciente.
¡Esperamos seguir viendo avances de este tipo en los próximos años!
Más información | Exovite