Recientemente hemos podido conocer el caso del “niño embarazado” de Chiclayo (Perú), en realidad se trata de un caso de Fetus in fetu o la formación de un feto dentro de otro feto durante las semanas del embarazo. El niño de tres años tenía alojado en su abdomen lo que se denomina como feto parásito, aunque se denomina feto por su forma humanoide en realidad no se puede considerar un ser humano ya que no tiene órganos funcionales, es simplemente tejido humano que depende totalmente del organismo hospedador.
El fetus in fetu o feto parásito se forma accidentalmente en un determinado punto de la formación del cigoto, es decir, la unión entre el espermatozoide y el óvulo que da paso a las divisiones celulares que terminarán formando el embrión. Se produce un caso de cada 500.000 nacimientos, en los países desarrollados este tipo de problemas se pueden detectar con más facilidad a través de las ecografías, sin embargo, en este caso y como se puede ver en el vídeo, el caso de fetus in fetu se produjo en Loreto (Amazonas).
Los padres decidieron llevar al pequeño al hospital de la ciudad de Chiclayo (Perú) dado que durante bastante tiempo se había quejado de fuertes dolores en el abdomen que además tenía muy hinchado, algo que los médicos de la ciudad de origen no podían explicar. La ecografía mostró algo similar a un huevo de gallina que contenía una formación humanoide con huesos y columna vertebral pero como hemos dicho, sin órganos. El feto parásito tenía unos 25 centímetros de tamaño y un peso aproximado de 700 gramos, se debía proceder a la extirpación de esta formación que había estado vinculada al niño durante tres años y que le había causado muchos problemas.
Doce médicos y tres horas de operación lograron extirpar el feto parásito, que una vez extraído muere al ser dependiente totalmente del hospedador, ahora el pequeño podrá tener una vida normal.