Ya, ya pasaron las fiestas, los platos copiosos con familiares y amigos, ya pasaron los días de excesos y comidas a deshoras. Ya pasaron los picoteos de la bandeja de turrones y demás dulces navideños. Es tiempo de desengrasar y de volver a la rutina.
Este plato no tiene nada de particular, es solo para que os apetezca a todos preparar platos como este en estos días para aligerar un poco el organismo. Yo particularmente estoy un poco saturada. Ya solo ver la fotografía invita a comer sano verdad?
Y yo que llevo tres días de baja laboral con una afonía increíble (laringitis aguda), y dolor de garganta pues ya veis como he empezado el año. Hoy ya puedo hablar un poquito pero tampoco para tirar cohetes vamos.
INGREDIENTES
-tres filetes de pechuga de pavo por persona
-hierbas aromáticas a vuestra elección (a mi me gusta mucho poner orégano, ajo molido, perejil, tomillo) todas ellas secas, del especiero
-pimienta negra recién molida
-aceite de oliva y sal
-lechuga y semillas de sésamo para la ensalada de acompañamiento
PREPARACIÓN
Estos son los filetes de pechuga de pavo que compro ya fileteados. Los descubrí no hace mucho y me encantan para días que hay que compensar fiestas o cumpleaños o cualquier otra celebración.
Con algo de antelación pondremos a macerar las hierbas escogidas en una taza con un poco de aceite de oliva. A la hora de preparar los filetes les ponemos sal y pimienta recién molida y los pintamos con el aceite de hierbas.
Ponemos una plancha o sartén amplia a calentar en el fuego fuerte. cuando esté caliente ponemos los filetes con la tijereta y los dejamos hacer un par de minutos por cada lado.
Pasar directamente al plato de servir. Colocar unas hojas de lechuga bien lavadas y espolvorear semillas de sésamo. Aliñar con sal, aceite de oliva y vinagre de manzana.