Si leemos las cosas con mucha rapidez minimizamos conceptos y reflexiones importantes. Por eso, ahora, comentamos dos claves:
- El principio de inercia es un descubrimiento, y no una ley. No puede demostrarse, pero nadie ha podido contradecirlo. Esto tiene una analogía con la Comunicación Humana: cuanto más objetiva es nuestra comunicación, menos posibilidades tenemos de que sea puesta en entredicho; solamente nos puede corregir un experto en la materia, ya que evitamos valoraciones subjetivas; además, en este caso, aprendemos.
- ¿Os habéis preguntado por qué existe la inercia?. No se sabe; es decir, hay cosas que no nos las cuestionamos.
Vamos allá…. Acabamos de nacer.
Nuestra vida ha arrancado, y se rige por el principio de inercia; si nadie nos toca, empezamos a fluir.El tren arranca; cruzamos viaductos, llanuras y valles; el humo espeso y constante nos da energía para acariciar una realidad construida con abetos y ríos de alta montaña. A lo lejos escuchamos el canto de personas, y después, tomamos una curva muy ancha a la derecha. Todo es perfecto y a velocidad constante. El tren empieza a subir la cuesta de la cima más alta de la tierra y, de repente, salta al espacio….Ahora ya somos una estrella, formados de gas y polvo; fluimos y fluimos, como el sonido del tren, a velocidad constante; pasamos al lado de las lunas de Júpiter a la misma velocidad, nos imaginamos las cosas buenas que piensan acerca de nosotros algunas personas, y nos sorprende gratamente; hacemos un lazo y atravesamos un cúmulo globular de estrellas, ¡y una galaxia!, qué bonita; seguimos…….y seguimos….en este misterioso tren de la vida, a velocidad constante. Es un placentero viaje a lo desconocido que no tiene fin….ni tiene fricciones….Al analizar esta situación nos preguntamos si los viajeros que corean en los otros trenes llevan la misma velocidad que nosotros, y es entonces cuando descubrimos que todos los trenes son diferentes, aún sin tener interferencias; ¿por qu
Si creamos nuestra propia inercia y no nos rendirnos, somos capaces de cuestionarnos cada vez menos nuestras limitaciones, porque éstas no son ninguna Ley.
Una vez ya hemos experimentado cómo se viaja a lo desconocido a velocidad constante y sin interferencias, estamos preparados para entender qué es la gravedad, y cómo se mueven los planetas.
El comportamiento humano y las leyes de la fisica