- Corea, una de las economías más prósperas del planeta, atribuye su éxito a la disciplina y la claridad de una agenda a largo plazo basada en el recurso humano y la conciencia sobre los temas globales
- El país asiático apunta a la planificación estratégica, la articulación de los sectores público y privado, el sistema de monitoreo de la gestión verde y la articulación y alineación de las instituciones de apoyo.
El 7 de noviembre se llevó a cabo en Caracas, el foro Cooperación Económica Verde para el Desarrollo Sostenible en el país, auspiciado por la Corporación Andina de Fomento y la Embajada de la República de Corea. El énfasis de este año se dio en torno en la transformación productiva, ese cambio estructural de los sistemas tradicionales de producción de bienes y servicios, orientado a lograr mayor eficiencia y competitividad en los encadenamientos productivos, bajo una visión de sostenibilidad de las dimensiones financiera, económica, socio cultural y ambiental. Las experiencias mostradas de Perú, Argentina, Colombia y Corea, más los aportes de los representantes de la CAF, coincidieron en que la eficiencia en la gestión es la clave para el crecimiento verde.
Durante la sesión de apertura, el Embajador de la República de Corea en Venezuela, Joo-teck Kim y el Presidente Ejecutivo de la CAF, Enrique García, presentaron una visión de las oportunidades y de los desafíos de la transformación productiva en el contexto Asia América Latina. Corea mencionó como objetivos impulsar la asistencia para el desarrollo, una mayor contribución para la paz y un mayor apoyo para la conservación ambiental. Por su parte, Enrique García comentó la necesidad de que los países sean consistentes con el ambiente, que estén en línea con principios sanos que ¨mitiguen las malas costumbres que hemos adoptado por décadas¨.
Carlos Chanduvi, director de Programas Latinoamericanos de la Organización de Naciones Unidas, participó conversando sobre la eficiencia de los recursos y los indicadores de crecimiento verde en América Latina. ¨Eficiencia es la palabra, en la planificación estratégica, en la articulación de instituciones y servicios, en las cadenas productivas, todo lo cual se traduce en calidad de vida¨. Chanduvy comentó las mediciones de la gestión de cada país hechas por el OCDE, una metodología ya probada en 34 países para evaluar desempeño.
José Luis Curbelo, vicepresidente Corporativo de Estrategias de Desarrollo y Políticas Públicas de la CAF, expuso la importancia de la transformación productiva para una economía baja en carbono. Se trata de ¨cómo hacemos compatible el conservacionismo con el crecimiento y con un futuro económico sostenible para las próximas generaciones¨. Recomendó apoyar a los gobiernos para que estimulen la producción en condiciones que no tengan impactos y daño ambiental, ¨trabajar con las pymes demostrándoles que los temas ambientales no son un costo sino una oportunidad¨.
La viceministro de MyPE e Industria de Perú, Magaly Silva, contó que su país ha firmado varios acuerdos con Corea. Para esta funcionaria, la clave es la continuidad política. Ya han pasado tres gobiernos y se mantiene la meta de una sociedad basada en la democracia, la equidad, la justicia y la competitividad. ¨Se está trabajando coordinadamente con los ministerios para el cuidado del ambiente buscando un desarrollo industrial en función de la sofisticación (investigación y desarrollo), la ampliación y la descentralización¨.
Pablo Daniel Muse, subsecretario de Evaluación de Proyectos del Gabinete de Ministros de Argentina, comentó que su país tiene una amplia visión de los desafíos futuros, pero también de las urgencias presentes. Un aspecto relevante es la comunicación de todas las obras gubernamentales que se adelantan y no se conocen en materia ambiental. Laura Pasculli, del Ministerio de Comercio Exterior, Industria y Comercio de Colombia presentó el Programa de Transformación Productiva de ese país, una alianza público privada orientada a fortalecer el aparato productivo colombiano, aprovechar las oportunidades que surgen de acuerdos comerciales y mejorar la calidad de vida.
Ricardo Bartolino de la Red Argentina de Municipios frente al Cambio Climático, explicó la experiencia de esta red. Tras un aporte y una carta compromiso los gobiernos locales reciben e intercambian datos en capacitación, espacios para compartir, experiencias en áreas de trabajo, movilidad sostenible, compostaje, gestión de residuos, etc. Foros ambientales juveniles, ecoclubes, reconocimientos al compromiso ambiental, jornadas creativas, centros culturales verdes y tantas otras son las iniciativas que promueve esta organización.
Michael Penfold, director de Políticas Públicas y Competitividad de la CAF expuso que América Latina debe tomar en cuenta la importancia del diálogo público privado y la necesidad de fortalecer el apoyo a instituciones y capacidades locales. Para Penfold el fortalecimiento de las cadenas de valor requiere un claro acercamiento al acceso de mercados, la adopción de tecnologías verdes, la elevación de estándares de calidad y la integración de las PyME. Ligia Castro, directora de Ambiente del organismo de desarrollo, acentuó la necesidad de la transformación productiva para migrar a economías bajas en carbono. Comentó los programas de la CAF, tanto internos como externos en materia ambiental. En todos, el objetivo es fomentar un cambio estructural de producción y consumo.
Proyecto de restauración cuatro ríos. Corea mostró el impresionante proyecto de recuperación de cuatro ríos de ese país. Tras el aumento de las inundaciones en el territorio producto del cambio climático, que anegaban poblaciones enteras comprometiendo el desarrollo económico y la calidad de vida, el Gobierno decidió iniciar una labor de remoción de sedimentos. Los ríos presentaban además una alta contaminación con el subsecuente compromiso de la fauna y la flora. Las autoridades se propusieron asegurar el suministro de agua, garantizar la calidad de la misma, restaurar los ecosistemas y promover la economía global. Tras la culminación de esta obra, se crearon ciclovías y anfiteatros en las orillas, se restauraron humedales y pantanos, se elevaron los terrenos agrícolas, se restauraron afluentes y se construyeron pequeñas presas y hasta sitios para acampar. El daño por inundaciones se redujo notablemente y actualmente se hace evaluación y monitoreo constante.
Por Heidy Ramírez Schmegner @ideagenial Miembro de la red Periodismo ante el Cambio Climático