Revista Comunicación
A finales de los años setenta, el sistema bancario no era un trabajo al que se entraba para hacer grandes sumas de dinero. Era una maldita siesta, lleno de perdedores, al igual que la venta de seguros o la contabilidad. Y si la banca era aburrida, el Departamento de Bonos de un banco era totalmente comatoso.
Todos sabemos sobre bonos. Se los das a tu hijo cuando cumple quince años. Tal vez cuando tenga treinta, gane cien dólares. ¡Aburrido! Eso era así hasta que Lewis Rainieri llegó a la escena en Salomon Brothers. Es posible que no sepas quién es. Pero cambió tu vida más de Michael Jordan, el I-Pod y YouTube junto.
Y Estados Unidos apenas se dio cuenta que la vieja y aburrida banca se había convertido en la industria número uno. Y entonces, un día, casi treinta años después, en 2008, todo se vino abajo.
Mientras todo el mundo estaba teniendo una gran fiesta, unos pocos fuera del sistema y bichos raros vieron lo que nadie más podía.
Estos forasteros vieron la mentira gigante en el corazón de la economía y lo vieron al hacer algo que el resto de los tontos nunca pensó hacer. Ellos miraron.
Todo el negocio de este tipo está basado en despojar gente. ¿Cuánto tiempo puede durar?
¡Pero el mercado de la vivienda es sólido como una roca!
Alan Greenspan lo acaba de decir: “Las burbujas son regionales. Las faltas de pago son raras”.
Wall Street ama usar términos confusos para hacerte pensar que sólo ellos pueden hacer lo que hacen. O mejor aún: para que los dejes de molestar.
Por cierto, estas hipotecas de alto riesgo se denominan “Sub-Prime”. Así que cada vez que oyes “Sub-Prime” piensa: “¡Mierda!”
-¿Cómo sabes que los bonos no valen nada? ¿No están llenos de miles de malditas páginas de las hipotecas?
-Las leí.
-¿Las leíste?
-¡Sí!
-Nadie las lee. Sólo los abogados que las redactan las leen. No creo que ni siquiera ellos sepan lo que han hecho.
El mercado de la vivienda está apoyado en estos préstamos malos. Es una bomba de tiempo y quiero detonarla.
-Paul es un buen muchacho y Mark es un excelente estudiante de la Torá y el Talmud.
-¿Entonces cuál es el problema rabino?
-Es la razón por la Mark está estudiando muy duro. ¡Él está buscando inconsistencias en la palabra de Dios!
-¿Y encontró alguna?
-Es una tormenta de mierda aquí, cariño. No tienes idea de la clase de mierdas que las personas están haciendo. Y todo el mundo está caminando como si estuvieran en un maldito video de Enya. ¡Todos están siendo jodidos sabes! ¿Sabes lo que les importa? ¡Se preocupan por el fútbol o cuáles actrices entraron en rehabilitación!
-Creo que deberías intentar medicarte.
-No. ¡No! Lo acordamos. Interferiría con el trabajo.
-Odias Wall-Street. Tal vez es hora de retirarte.
-¡Amo mi trabajo!
-¡Odias tu trabajo!
-¡Amo mi trabajo!
-¡Eres miserable!
Esto es Wall Street, Dr. Burry. Si nos ofrece dinero gratis, vamos a tomarlo.
-Me gustan estas tazas. ¿Puedo tomar una para mi hijo?
-Sí, sí… ¡Gracias! ¡Llévese dos!
-¿Así que ahora tenemos que pagar las primas en estas operaciones contra el mercado de vivienda hasta que las hipotecas fracasen?
-En otras palabras...
-¿Perdemos millones hasta que algo que nunca ha sucedido antes suceda?
-¡Eso es correcto!
Su pequeño equipo: su desconfianza en el sistema.
-Ella dice que este trabajo me hace infeliz.
-Pero tú eres feliz cuando eres infeliz.
A ver... espera… ¿Él quería hacer una venta en corto de los fondos de vivienda? ¿Quién apuesta en contra de los bonos de vivienda?
Estos suertudos hijos de puta se dieron cuenta, de uno de los mejores negocios en la historia de Wall Street por un llamado a un número equivocado. Deberían haberle pagado el 10% al que lo puso en el conmutador.
-Por lo que usted está aquí, hablando con nosotros, desde un teléfono equivocado. Suena que hay mucho interés.
-Está bien. Poca gente nos ha escuchado… sólo para reírse de mí con este trato. ¿Ustedes también? ¿De eso se trata esto?
-¿Huelen eso? ¿Qué es?
-¿Qué?
-¿Qué es ese olor?
-¿Colonia?
-No.... Oportunidad. No... Dinero. Huelo dinero...
En algún punto, estas B's y BB's se transformaron de “un poco riesgosas” a “caca de perro”.
Si se van a 8... es el Apocalipsis.
-Véanlo... Ese es mi analista cuantitativo.
-¿Tú qué?
-Mi cuantitativo... ¡Mi especialista matemático! Véanlo! ¿Ya notaron algo diferente en él? ¡Vean su cara!
-Eso es muy racista
-¡Vean sus ojos! Les daré una pista: ¡su nombre es Yang! Ganó una olimpíada nacional de matemáticas... ¡en China! ¡Ni siquiera habla inglés!
Nadie está poniendo atención. Porqué los bancos están muy ocupados obteniendo ganancias obscenas por vender estos bonos.
Traes una camisa buena…. ¿la hacen para hombres?
Yo trabajo para el banco. No pienso como banco.
Déjenme ponerlo de esta manera: estoy parado frente a una casa ardiendo y les estoy ofreciendo un seguro de incendios sobre la casa.
Obligaciones de deuda garantizadas. Es importante que lo entiendan, porque es lo que permitió a la crisis de vivienda convertirse en un desastre a nivel nacional.
Me llaman el “Chico Burbuja”.
Los bancos nos han dado tasas del 25% en las tarjetas de crédito... nos han jodido con préstamos para becas que nunca podremos levantar... Y de repente este tipo entra en mi oficina y dice: “Esos mismos bancos se volvieron avariciosos y perdieron control del mercado. Y puedo hacer una ganancia de su estupidez”. ¡Maldita sea! ¡Sí! Quiero que esté en lo correcto. Quiero decir, ¿cómo no odiar a este tipo? Representa lo que siempre nos has enseñado a no confiar.
No puedes odiarlo... es tan transparente en su propio interés que hasta lo puedo respetar... ¿Compraría un auto con él? No.
Son dos preguntas muy sencillas: ¿Hay una burbuja en la vivienda? Y si la hay: ¿qué tan expuestos están los bancos?
¿Quién diablos agenda una cita a las 4:50 de la tarde?
Nuestra estrategia de inversión era simple. La gente odia pensar que pueden pasar cosas malas, así que siempre subestiman las posibilidades. Su estrategia era simple y brillante. Lo que él dijo: encontraron que los mercados venderían muy baratas sus opciones de cosas que piensan que nunca pasarán. Así que cuando se equivocaban, era pequeño el error. Pero cuando acertaban, ganaban en grande.
Las semillas serán la nueva moneda de cambio. Y no esas Monstruo-semillas de Monsanto. Estoy hablando de semillas buenas y orgánicas. Hagan su jardín. Aprendan a vivir de la tierra.
-Hola. Estoy haciendo una encuesta sobre dueños de hipoteca que tengan más de 90 días de mora. Estoy buscando a Harvey Humpsy
-¿Buscas al perro del dueño?
-¿Su arrendador llenó su solicitud para una hipoteca usando el nombre de su perro?
-Eso creo
-Todos pueden ver que hay una burbuja inmobiliaria.
-De hecho nadie puede ver una burbuja. Eso es lo que hace una burbuja.
-Sabe más que Alan Greenspan y Hank Paulson...
-No he hablado con Hank. Pero sí...
Yo no sé cómo ser sarcástico. No sé cómo ser gracioso. No sé cómo convencer a la gente. Yo sólo sé leer números.
Los ajustables es el pan de cada día.
Mi firma ofrece prestamos SISE: “Sin Ingresos, Sin Trabajo”.
-No lo entiendo… ¿por qué están confesando?
-No están confesando. Están presumiendo
Créeme. No manejaría un BMW serie 7 si no fuera por las strippers.
¿Quién es Warren Buffett?
Hola… escucha… tengo una última pregunta para ti. ¿Cómo nos estás jodiendo?
¿Quieres saber que sacan ustedes? Ustedes se quedan el helado, el caramelo, la banana y las nueces. Ahora mismo yo me quedo con las chispas de chocolate... Y si esto funciona, me quedo con la cereza. Pero ustedes se quedan con el helado.
Seré honesto, caballeros... realmente me asustaron.
¿Qué puedo decir? Soy… soy... soy bueno encontrando mierda.
La verdad es como la poesía. Y a la mayoría no le gusta la poesía.
Así que, los préstamos de riesgo ahora son malos. Pero… ¿los bonos de riesgo, que están hechos de préstamos de riesgo, ahora son más valiosos?
Ok, quiero que regreses ahí y muy calmada y cortésmente le digas a los asesores de riesgo que se vayan a la mierda.
-¿Qué creen que hacemos aquí todo el día?
-No estamos seguros. Por eso estamos aquí.
Si no les damos la calificación que quieren, irían con Moody que está en esta misma calle. Si no trabajamos con ellos, simplemente van con la competencia. No es nuestra culpa. Así funciona.
¿Ésa es la posición que vas a tomar? ¿Ahora cualquiera que tenga un jefe no es responsable de hacer cosas ilegales de mierda? ¿Eres una niña?
Es como si dos más dos diera... ¡pescado!
Carajo… me tiró un músculo de tanto gritar.
-Ahora están en apuros… ¿creen que el negocio está acabado y ustedes se sorprenden?
-Eso no es estupidez. Es fraude.
-Dime la diferencia entre estúpido e ilegal y haré que arresten al hermano de mi esposa.
Sí. Están pasando cosas turbias pero, créanme, está impulsado por la estupidez. Mírense a ustedes mismos... se hacen pasar por gente cínica pero aun tienen algo de fe en el sistema, ¿no?
O estamos bien o estamos mal de forma gigante. Gigante... Y si estamos mal necesitamos encontrar a alguien que nos ayude a salir de este acuerdo.
No me siento ni remotamente confiado de que estamos bien. Y si estamos mal... ¿quién nos lo va a decir?
Hay mucha gente con cara de idiota aquí, ¿eh?
Charlie, Vennett cree que esta gente es contra la que estamos apostando.
Tengo una pregunta, por favor.
¡Cero! ¡Cero! Hay una posibilidad de 0% de que las pérdidas de sus primas de riesgo paren en 5%.
Mmm, no investigamos bonos hipotecarios... La verdad es que desde que nos cortaron el presupuesto no investigamos casi nada.
Es posible que estemos en un sistema totalmente fraudulento. O que esté equivocado.
-¿Tienen la mas mínima idea de lo que acaban de hacer?
-¡Vamos! ¡Hicimos el trato de nuestra vida! ¡Debemos celebrar!
-Acaban de apostar en contra de la economía de Estados Unidos.
-¡Si! Maldita sea
-¡Sí!
-Lo que quiere decir...
-Sí… carajo...
-Los que quiere decir que, si acertamos, la gente pierde sus casas... la gente pierde sus trabajos... la gente pierde sus ahorros del retiro... pierden pensiones... ¿Saben lo que odio de los bancos? Reducen las personas a números. He aquí un número: cada 1% que el desempleo aumenta 40 mil personas mueren, ¿sabían eso?
Sólo no bailen. Maldita sea.
-Déjame entender esto... ¿el banco te habla, te dan los bonos que quieren vender, te dan los clientes, te dan dinero para que operes tu negocio, te dan bonos gordos por hacerlo pero tu representas a los inversionistas? ¿Es así?
-Sí. Pero no estamos en el edificio de Merrill-Lynch.
-Ok, ¿dónde están?
-En New Jersey.
-A 20 minutos.
-Cinco si usas el helicóptero.
Si los bonos de hipoteca fueran un fósforo y los CDOs fueran los trapos empapados en gasolina, entonces los CDOs sintéticos eran la bomba atómica, con un presidente ebrio con el dedo puesto sobre el botón.
Fue en ese momento, con ese tonto en el restaurante con esa estúpida mirada que Mark Baum se dio cuenta que toda la economía del mundo podría colapsar.
La gente cree que cualquier cosa que pasa en este momento seguirá pasando en el futuro. Durante el boom inmobiliario, los mercados subían y subían. Y la gente creyó que nunca bajarían.
Cree que soy un parásito… ¿no es así, señor Baum? Pero aparentemente la sociedad me valora mucho.
-¿A dónde vas?
-Voy a tratar de encontrar la redención moral.
-Cariño, creo que la economía puede colapsar.
-Has venido diciendo por años que el sistema está descompuesto. ¿Por qué estás tan sorprendido?
-Está más retorcido que lo que pude haber imaginado.
-Te encanta ser el virtuoso aquí...
-Soy un banquero, soy parte de esto.
-Siempre lo has sido, Mark. Como si no tuvieras culpa.
-Me ha cambiado… me ha cambiado en una persona que no es capaz de llegar a alguien...
No hay una forma perfecta de ayudar. Suena aterrador... Así que dejas de intentar arreglar el mundo...
No eres un santo. Los santos no viven en Park Avenue.
Mi primera respuesta fue ofrecerle algo de dinero... le ofrecí maldito dinero.
No hay forma de que los grandes bancos sean tan estúpidos.
Dijo que necesito usar Xanax y doblar mi dosis de Zoloft.
¿Te das cuenta? Estas personas son ladrones. Deberían estar en prisión.
-¿Quieren que escriba un artículo llamado “Estamos jodidos”?
-Sí. Es un título perfecto.
Este nivel delictual no tiene precedentes. Incluso en Wall Street.
-¿Qué escuchaste, Tony?
-Está sucediendo.
-No estoy seguro que es lo que quieres que diga.
-Creo que ya lo has dicho.
Todo este tiempo he estado tratando de averiguar contra quien estoy apostando. Y es en contra de Morgan-Stanley... El cual soy yo.
Entro aquí y hay gente llorando en tu pasillo, Kathy. Me traes y me dices que todo está bien. Pero nada está bien.
Morgan hace una estúpida apuesta ¿Y nosotros pagamos su deuda?
Vamos a esperar y vamos a esperar. Vamos a esperar hasta que sientan dolor. Hasta que sangren. Eso es lo que quiero.
Entonces, estaba en lo cierto. Recibí senda mierda durante dos años, pero... estaba en lo cierto Y todos estaban equivocados.
Es mucho dinero. Lo sé. Te siento juzgándome. Es entendible. Pero, ¡oye!, nunca dije que era el héroe de la historia.
Ustedes dijeron que querían ser ricos. Ahora son ricos.
Vivimos en una era de fraude en América. No sólo en la banca sino también en el gobierno. Educación, religión, comida, incluso beisbol. Lo que me preocupa no es eso. El fraude no está bien. O que el fraude es malo. Es que en los últimos 15 mil años, fraude y poco pensamiento nunca han funcionado. Ninguna vez. ¿Cuándo carajo nos olvidamos de eso? Creí que éramos mejor que esto. Realmente lo creí. Y el hecho de que no lo seamos, no me hace sentir bien ni superior. Me hace sentir… triste.
Y aunque resulte gracioso de presenciar, los presumidos estúpidos de Wall Street están salvajemente equivocados. Y usted está equivocado, señor. Sólo sé que, al final del día, la gente normal es la que va a tener que pagar por todo esto. Porque siempre, siempre lo hacen.
Hacer dinero no es lo que creí que era. Este negocio mata una parte de la vida que es esencial. La parte que no tiene que ver con negocios.
Todas las personas que respetaba no me hablan más. Excepto a través de sus abogados. La gente quieren una autoridad que les diga como valorar las cosas. Pero eligen a una autoridad que no se basa en hechos ni en resultados. Esto no es como lo imaginé.
-Ellos sabían. El dinero no habría salido de las ATM tenían que parar todo esto. Sabían que los contribuyentes soportarían todo. No fueron estúpidos. Sólo no les importó.
-Sí, porque son unos putos ladrones. Pero al menos veremos a algunos de ellos ir a prisión. ¿Cierto? Vamos a tener que romper los bancos. La fiesta terminó.
-No lo sé. No lo sé. Presiento que en unos años la gente hará lo que siempre hace cuando la economía falla. Culpar a los inmigrantes y a los pobres.
Sabes… una vez que vendamos, seremos como el resto de ellos.