En el vuelo de vuelta de Tenerife cogí la revista de Spanair y vi el anuncio de la exposición de Frida Kahlo en Berlin, hacia 2 semanas que había reservado el viaje para julio y vi que me concidian las fechas. Así que visité la web de Martin Gropius Bau para comprar la entrada.
Lo que conocía de Frida Kahlo era a través de la película de Salma Hajek y la canción de Pedro Guerra, El elefante y la paloma. Así que de la pintora Frida sabia poco y me sorprendió mucho lo colorido y el realismo de los retratos.
Para empezar el lugar de la exposición, la galería Martin Gropius Bau es un precioso edificio de finales del siglo XIX cerca de la Potsdammer Platz que alberga esta clase de exhibiciones. La exposición estuvo abierta al público hasta el 9 de agosto y a juzgar por la hora de cola que tuve que esperar para entrar tuvo mucho éxito.
La exposición comienza con fotos de Frida hechas por diferentes fotógrafos y va siguiendo un orden cronológico a través de cuadros y objetos. Entre otros objetos estaba su corsé y vestidos típicos mexicanos. De cuadros estaban sus autorretratos, retratos de su familia y bodegones.
La entrada costaba 11€ y a pesar de la hora que tuve que esperar para entrar, vale la pena la visita, se fue de Berlín pero estará en Viena a partir del 1 de septiembre según he visto en el periódico venezolano El Universal.
Dejamos a Frida que vaya a Viena y Travelling Dijuca a Barcelona donde tiene lugar la exposición de la que hablaré en el próximo post.
Hasta la próxima.