Autor: Alicia Serrano.
Nos cuenta Alicia que esta foto fue realizada el 25 de noviembre de 2012 en las cercanías de Sigüenza, para ser un poco más exactos, en los encinares de la carretera de Guijosa y utilizo una cámara Canon EOS 600D.
También nos comenta que había muchos ejemplares de Amanita muscaria en todas sus fases de desarrollo, todas ellas debajo de las encinas que pueblan las laderas del monte.
Desde el punto de vista micológico decir que la Amanita muscaria es un seta tóxica y como curiosidad podemos comentar que, aunque esta seta es apellidada muscaria, su contenido en muscarina es ínfimo. Está estimado en un 0,0002%, es decir, 2 miligramos por cada 100 gramos de hongo fresco. Pero sí sabemos que posee un alto contenido de muscinol, que unido a otros componentes que posee como el ácido iboténico, el ácido tricolómico y la muscazona son los que producen los efectos insecticidas y nárcoticos de esta seta.
El problema que daba esta seta, y que gracias a los últimos estudios realizados se ha podido solucionar, era que su intoxicación se trataba con atropina lo cual hacía que los efectos de la verdadera toxina el muscinol se incrementaran, siendo peor el remedio que la enfermedad.
Decir que esta seta lleva unidas muchas leyendas y ritos. Como ejemplo podemos destacar los renos voladores de Papa Nöel, los aquelarres de brujas, los chamanes que las utilizan para ponerse en contacto con los dioses o los potentados siberianos que las utilizaban para agasajar a sus invitados en fiestas y celebraciones.
Aquí tenemos a la autora de la fotografía y Mª Carmen Hernando, secretaria de la Sociedad Micológica de Sigüenza, entregándole el premio. Enhorabuena Alicia.
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