Yahe hablado muchas veces de mi condición de fan de los Fun Lovin'Criminals. Han sido unos asiduos a estas líneas, como podéiscomprobar haciendo click en la etiqueta que lleva su nombre. Es porello que la publicación de un disco en directo del trío neoyorkinodebería suponer una noticia grata. Y lo es, que no quepa la menorduda. Sin embargo, no deja de haber un poso agridulce en la misma,que a la postre, es sintomático de cómo está el mundo de la músicahoy en día, de rock y del pop, digamos, “no mainstream” (para elcaso del rock esa acotación ya no es necesaria, el rock hacedemasiados años que no es de consumo al gran público). Ya comentécuando hablé en su momento de “Classic Fantastic” (2009) que elcombo estaba pasando por momentos definitivamente muy lejos de épocaspretéritas. La publicación y difusión de ese trabajo fue costosa,y a través de una compañía pequeña, la suya propia, KiloHertz. Yno hay nada malo en ello, claro, pero verse obligados a trabajar encompañías que no pueden invertir en bandas, en promos y en buenasgrabaciones, demasiado a menudo, provoca que la banda acabe cerrandola barraca. Afortunadamente, de momento no es así. Pero si lapresencia de “Classic Fantastic” en las tiendas era más bienescasa, casi testimonial, la de este disco en directo, “Fun, Live &Criminal” (2011), es nula, y sólo se puede conseguir haciendo unpedido en su sitio web.
Bonito packaging
Dehecho, para poder sacarlo al mercado, FL'C hizo algo ahora cada vezmás común, y es pedir órdenes de compra por adelantado, para poderfinanciar el proyecto. Para un grupo que vendió miles de copias desus tres primeras grabaciones, resulta ser algo extraño, el hallarseen esta tesitura. Por un lado me alegro de que la banda sigaadelante, esté en muy buena forma (“Classic Fantastic” es ungran disco) y no haya acabado como otros nombres de los 90's que,aunque rebosaran calidad, no llegaron a los niveles de popularidadesperados, más por las compañías aunque a veces también por ellosmismos, y decidieran abandonar. Por otro lado, me jode no poderencontrar los discos de FL'C en cualquier tienda, al alcance decualquiera, que no estén copando portadas de los medios y,sobretodo, que sea difícil que los promotores españoles se animen atraerlos por aquí. Claro que, por otra parte, tampoco quisiera quemi vecina de enfrente tuviera “City Boy” de politono en el móvilo que sus conciertos fueran noticia porque los jugadores del Barçaestaban en la zona de celebrities de la sala. Qué complicados somoslos fans.Enfin, por supuesto que hice mi pedido del disco y diligentemente, alcabo de unos pocos días recibía mi paquete en casa. La muchacha deKiloHertz me mandó un e-mail diciéndome que lo sentía, que se ibana retrasar un par de días, los que tardaría Huey en pasarse por laoficina y firmar el ejemplar. Al final, un majestuoso triple CD endirecto firmado por Huey, Fast y el que es su batería desde hace yaunos años, Frank. Qué más puedo pedir?
Tres firmas para personalizar una copia
Permitidmeque os explique una anecdotilla. Creo que en alguna ocasión ya lohabía contado, es igual. Cuando me puse Internet en casa, hará unosdiez años, y comencé a trastear por webs, una vez entré en elsitio oficial, por aquél entonces, de Fun Lovin' Criminals. Había,claro, una dirección de contacto, y allí estaba, al ipso facto,vuestro buen amigo Kar, joven, despreocupado, lozano y algo naïve,mandando un correo a la banda, a la que acababa de ver por segundavez en concierto, un correo lleno de elogios y sugiriéndoles quetenían que grabar un disco en directo, al tratarse, como son, de ungrupo que dota a sus temas de un tratamiento muy diferente en estudioque sobre el escenario. La respuesta no tardó en llegar, un lacónico“Thanks for the love” El disco en directo tardaría una décadamás.
Triple CD de lujo
Enalgunos temas, las partes pregrabadas restan capacidad para laimprovisación, eso es cierto. En general, no obstante, lasrelecturas de sus canciones resultan francamente interesantes. No setrata de un concierto entero, sino de grabaciones de varios de susshows. Luego, cada uno de los 3 CD's que componen el disco estámezclado y estructurado como si de 3 conciertos diferentes setratara, con tres setlists distintos. Así, en todos ellos haymomentos para el rock n' roll, para los himnos, para los aires másgroove y las baladas.Personalmenteconsidero que los temas escogidos son los mejores y másrepresentativos, y no me quejo por la exclusión de ninguno enparticular. Así, nos topamos con grandes momentos como “Big NightOut”, “City Boy”, “Classic Fantastic”, la épica de “TheBallad Of NYC” (en una versión que supera claramente la original)o el clásico imprescindible “Scooby Snacks”. Incluyen tres temasnuevos, que tampoco son para tirar cohetes, pero no están mal, y unaversión, amén de su conocida interpretación de “We Have All TheTime In The World”, de “Live Have Love”, que estaba como bonustrack de “Livin' In The City”.
Con ediciones así, quien se conforma con un triste archivo de mp3 ???
Pocomás puedo decir. Para los fans, obligatorio. Para los neófitos,puede ser un buen comienzo, aunque yo escogería antes uno de sustrabajos de estudio. Para los rockeros más cerriles a quienes suparticular sonoridad no acababa de convencer, puede ser una buenaopción. Y para los que les perdieron la vista en los últimos años,oportunidad de oro para el reencuentro.Porcierto, podéis comprar vuestra copia en http://funlovincriminals.tv/
Canciones:
Nirvana:“Love Buzz”TheGaslight Anthem: “American Slang”DinnosaurJr. : “Just Like Heaven”