Aelia Galla Placidia, más conocida como Gala Placidia, hija, esposa, hermana y madre de emperadores, fue una mujer excepcional en su época, precisamente un tiempo lleno de complicaciones y cambios, que marcaron algunos de los hechos más importantes de la historia universal.
Para poder hablar de ella, es imprescindible adentrarnos en el contexto histórico y geográfico en el que le tocó vivir.
Sin duda es una época con muchos cambios en poco tiempo, centrada en uno de los más bastos imperios que jamás han existido, el Imperio Romano.
Gala Placidia (nacida en el año 392) fue hija del emperador romano Teodosio I, llamado El Grande, y de su segunda esposa, Gala (a partir deTeodosio, gobernó en Roma la llamada dinastía teodosiana).
Nació en Costantinopla, entre lujos, como era común entre los emperadores de la época, la sala estaba rodeada de colores púrpuras, para que el recién nacido, naciese, valga la redundancia, ya entre ese color, símbolo del gran destino que le esperaba.
Toda la ciudad festejó su nacimiento.
Teodosio I
Teodosio I, fue el último emperador en gobernar todos los territorios del Imperio, tanto en Oriente como Occidente, como un todo (durante los años 379 al 395).
Antes del nacimiento de Gala, había tenido dos hijos varones con su anterior esposa: Arcadio y Honorio.
Pero, en esos momentos, el Imperio romano ya no era lo que había sido.
Los grandes cambios que supuso la conversión al cristianismo como religión oficial, por el emperador Constantino en el año 313, estaban latentes.
La religión podía ser un arma de doble filo, elemento de unión para algunos y de disgregación para otros, y sobre todo, por la proliferación de herejías, considerándose la más peligrosa para el estado el arrianismo, por la fuerza que estaba alcanzando.
Por otra parte, la presión que sufrían los territorios de mano de los bárbaros, hacía tambalear las bases del Imperio.
En al año 392, Teodosio, promulga el Edicto de Constantinopla, con el cual prohíbe el paganismo, y cualquier religión que no fuese la cristiana (las bases las había sentado ya en el año 380, recién llegado al trono, con el Edicto de Tesalónica, que imponía como religión oficial a sus súbditos el cristianismo).
A la muerte de Teodosio I, en el 395, el Imperio se divide.
Oriente pasa a manos de su hijo Arcadio, que contaba tan solo con 18 años cuando asume el poder.
Occidente, recaerá en su otro heredero, Honorio, sin embargo, en ese momento era tan solo un niño de 11 años, por lo que alguien debería de asumir la regencia hasta que fuese adulto.
Honorio
Ésto ya había sido previsto por Teodosio, que había dejado designado como tal a Estilicón, el general de todos los ejércitos, de origen bárbaro y más cerca del arrianismo que del cristianismo oficial.
Estilicón, comienza a urdir sus planes para hacerse con el poder. Lo tenía todo bien pensado, se casa con Serena, sobrina de Teodosio, y promete a su hijo Euquerio con Gala Placidia, para cuando tuviesen la edad, pues ambos no eran más que niños. Poco sabía entonces que todos sus planes se quedarían en agua de borrajas.
Estilicón, su esposa Serena y su hijo Euquerio
En el año 401, los visigodos entran en Italia, dirigidos por Alarico.
En el 405, los ostrogodos cruzan el Danubio, y en el 406, los suevos, vándalos y alanos, penetran en las Galias, cruzando el Rin, que en esos momentos estaba helado.
En estas, Estilicón, es apresado en medio de una revuelta y ejecutado, por lo que todos los matrimonios quedan anulados.
Alarico llega a Roma arrasando todo lo que encuentra a su paso, e impone como rey a Átalo, romano que se convirtió al arrianismo, religión que profesaban los godos.
Mientras, Honorio, permanecía en Ravena, capital occidental del imperio en esos momentos, y allí resistía al enemigo
En el año 410 los bárbaros saquean Roma, y entre los tesoros requisados, se encontraba también un ser humano: Gala Placidia había sido secuestrada por las tropas de Alarico.
Con ella se dirige al sur de Italia, y a las costas de Sicilia, para su conquista muriendo en el intento y le sucede Ataúlfo, que decide tirar hacia la Galia, y pide a Honorio, poder vivir en paz bajo un acuerdo al servicio del Imperio.
Se casa con Gala Placidia en Narbona en el año 414. Se llevaban 20 años, pero se dice que realmente estuvieron enamorados y que no fue un matrimonio pactado.
Se establecen en Barcelona y allí nace el fruto de su matrimonio: Teodosio.
Ataúlfo se frotaba las manos, ese niño era el único heredero del Imperio, dado que Honorio no tenía hijos.
Sin embargo, una vez más la muerte truncará los planes de los codiciosos, ya que el niño muere a edad temprana. El cuerpo del pequeño, fue enterrado en la catedral de Barcino(Barcelona), en un ataúd de plata, exhumado años más tarde y trasladado a la Basílica de San Pedro .
Boda de Gala y Ataúlfo
Poco después en el 415, Ataúlfo es asesinando.
El asesinato de Ataúlfo se debe a la venganza de uno de sus antiguos generales.
Un tal Sigerico se hace con el poder y se proclama rey de los visigodos, sometiendo a Gala a continuas humillaciones y asesinando a los hijos que Ataúlfo había tenido en un matrimonio anterior.
No acaban aquí los asesinatos y la lucha de poderes, pues viendo la crueldad de este hombre, Walia (hermano a su vez de Ataúlfo) se enfrenta a él, lo mata y se hace con el poder.
Deciden que es hora de que Gala vuelva a su Italia.
Su vuelta fue parte de un acuerdo, y se dice que se pagaron 600000 medidas de trigo por ella.
Una vez allí, casa en segundas nupcias, con el general Constancio.
Con éste tiene dos hijos, una niña llamada Honoria, y un varón nacido en el 419, llamado Valentiniano.
Honorio parecía ya tener un heredero para su Imperio.
Constancio además es declarado emperador augusto en el 421, con el nombre de Constancio III.
Nos habíamos olvidado de Oriente… ¿Qué sucedía en el otro lado del Imperio?
En Constantinopla, Teodosio II (hijo de Arcadio) soñaba con unir de nuevo ambos imperios y el nacimiento de sus sobrinos suponía un problema.
Gala Placidia y sus hijos
Pero, para problemas, los que vivía el Imperio en esos momentos, y que hacían que se tambalease cada vez más.
La frontera con el Rin estaba perdida, los bárbaros estaban totalmente adentrados en Hispania, los campesinos descontentos iniciaban revueltas, y las herejías eran cada vez más latentes.
En el año 423, rodeados de tales acontecimientos, mueren Constancio y Honorio, con la problemática de dejar un trono vacante codiciado por muchos, especialmente por el mencionado hermano de Gala, Teodosio II, afincado en Bizancio.
La lucha por ese trono se hizo tan peligrosa, que Teodosio II, decide proclamar heredero a Valentiniano (que sería Valentiniano III), mirando antes por el bien del Imperio que por sus ganas de poder.
Al contar éste con tan solo 5 años, asume la regencia Gala Placidia.
Esto, le era permitido según el derecho romano, si no se volvía a casar, algo que aceptó sin problemas, tanto por el bien de los territorios, como por sus convicciones religiosas.
Supo rodearse bien, la acompañaba la guardia visigoda (desde la muerte de su marido Ataúlfo), y algunos varones, entre ellos, Bonifacio, conde África, Félix, general de los ejércitos y Aecio, aliado de los Hunos.
Bonifacio, por sus ansias de poder, se enfrenta al obispado de África (lugar muy importante, pues este continente mandaba recursos a Roma para poder financiar los éjercitos) cruza el estrecho e inte ta conquistar el continente vecino. A consecuencia de esto se pierde el continente, y el Imperio empieza a caer en picado.
Gala luchó para no perder la alianza con África, llegando a un acuerdo con Genserico, rey bárbaro que había ocupado el continente.
Cuando Valentiniano alcanza la mayoría de edad y se casa, Gala desaparece de la vida pública.
El Imperio ya no es lo que era, ahora se fundamenta en el cristianismo que los antepasados cercanos de Gala Placidia comenzaron a fundamentar en Roma, y que dejaría paso a la cristiandad medieval.
Gala Placidia, mujer piadosa, se agarró a la fe en los últimos años de su vida, construyendo maravillosas iglesias de las que hoy somos testigos, y un mausoleo que lleva su nombre y que se ubica en Ravena.
Lo mandó construir en el año 425, y en él quiso enterrar a su marido Constancio y a su hermano Honorio.
Es uno de los mejores ejemplos conservados del arte Paleocristiano, austera en el exterior, contrastando con un interior con espectaculares mosaicos que representan escenas bíblicas.
En 1996 fue declarado patrimonio de la humanidad.
Interior del Mausoleo de Gala Placidia
Mientras, el Imperio, se volvía a tambalear por culpa de sus hijos, Valentiniano III era mal político y un cobarde.
Honoria, su hija, cometió un error que condenaría para siempre a Roma; como se le había concertado un matrimonio de conveniencia que no aceptaba, decide mandarle una carta a Atila, pidiéndole ayuda, en el interior de este misiva, mandaba también un anillo.
Atila, rey de los Hunos, lo toma como una petición de matrimonio, y viaja a Roma, pidiendo como dote la mitad del Imperio.
Enfrentándose entonces a Valentiniano, que quiere asesinar a su hermana para acabar con este problema.
Atila contra los romanos (Rafael)
Pero Atila, sigue reclamando lo que a su modo de ver, le pertenece, e invade Roma en el 451.
Éstos acontecimientos, y los sucesivos, ya no pudieron ser vistos por Gala, que falleció en el año 450 en Roma con 55 años, siendo enterrada en su mausoleo en Ravena.
Ni esto, ni el fin definitivo en el 475, del Imperio bajo el que había nacido.
<< Si vis pacem para bellum>>