Revista Belleza
Quizás no tengo el mejor estilo, ni la mejores ropas, pero lo que si puedo presumir es de buen gusto, es algo que no se ves reflejado en mi pero si en mi trabajo, en los productos de mi tienda o en las ideas que propongo en este blog.
El problema es que no dispongo de crédito suficiente para poner estas ideas en practica, como a todo el mundo que esta pasando por una crisis a mi tampoco es que me sobre mucho, pero cuando puedo intento hacer algo bueno o muy bueno, al menos para que esa sensación de impotencia no se apodere de mi.
Últimamente he dado por soñar que me quedo encerrada dentro de Ikea, jaja que curioso, cuando era niña soñaba con pastelerías, heladerías o tiendas de juguetes, una especie de versión de la película "Una noche en el museo (2006)" con derecho a atracones a todo tipos de pasteles y helados.
Pero ahora de mayor sueño constantemente con Ikea, será porque me pilla bastante lejos y mis visitas suele ocurrir 1 o 2 veces al año.Sueño cargando cajas y cajas de muebles, cojines, vajillas, incluso hago una pausa para la merienda (porque en los sueños no hay limites).Lo curioso de eso todo es que un momento tengo mi casa amueblada al estilo Shabby Chic, un estilo de decoración de origen británico donde predomina las flores y los tonos pasteles.
Mi dulce sueño es interrumpido por el maldito despertador que más bien parece una farola, son las 8:00h de la mañana y es hora de levantar. Solo era un sueño y mi vida sigue igual, menos mal que mi buen gusto por las cosas dulces y románticas es real, creo que es una vía de escape para eses momentos agrios que as veces parece no tener fin.
Y ya que os he hablado de mis gustos y mi sueños, hoy os traigo una receta de galletas de mantequilla pero con una decoración exquisita que expresa exactamente lo que busco, la sencillez y la dulzura, lo común con lo extraordinario, todo es posible, con un poco de azúcar, magia y una visa, porque seamos sincero, el dinero no trae la felicidad pero ayuda a poner en practica el buen gusto y los sueños, por eso he hecho una pequeña inversión, ahora diseño y creo decoraciones comestibles en papel de azúcar y obleas, otro producto más para mi tienda, espero que esta pequeña inversión me ayude a construir una futuro solido y que todo estés pequeños sueños aliado al buen gusto ...se hagan realidad.
Ingredientes galleta:
250 gramos de mantequilla
1 huevo
550 gramos de harina repostería
ralladura de limón o esencia de limón
175 gramos de azúcar glass
Elaboración:
- En un bol batir la mantequilla con un batidor de varillas suficiente para ablandar, no hace falta batir mucho.
- Añadir muy lentamente el huevo previamente batido, incorpora poco a poco con la mantequilla hasta que todo este bien integrado.
- Incorporar el azúcar, la ralladura o esencia de limón y por ultimo la harina.
- Amasar hasta formar una bola.
- Sobre el papel de hornear, estirar la masa, cubrir con otro trozo de papel de hornear y con un rodillo estirar hasta lograr un grosor suficiente para cortar una galleta.
- Dejar reposar en la nevera por 2 o 3 horas aproximadamente dependiendo de la temperatura, si hace mucho calor lo dejamos en la nevera 3 horas si hace frío con 1 hora es suficiente.
- Cortar círculos de 4 o 6 cm con un corta pastas o con un vaso de cristal.
- Hornear durante 15 minutos aproximadamente en un horno a 170º que previamente hemos precalentado para que la cocción sea rápida.
- Dejar que la galleta se enfríe lo suficiente, yo deje toda una noche para asegurar que al día siguiente estaría en la temperatura ideal para decorar.
Decoración:
Para la decoración utilicé obleas comestibles, un tipo de decoración muy común en tartas, se puede aplicar directamente sobre la galleta ligeramente humedecida o bien sobre fondant, en este caso hice directamente sobre la galleta.
La oblea esta impresa con tinta comestible, no aporta nada de sabor, es totalmente insípida, todo lo contrario del papel de azúcar, que es dulce y un ligero sabor a vainilla, ambos se trabaja con mucha facilidad y es ideal para las que no tenemos ni idea de decoración de galletas con glasas fondant, fácil y sencillo con un resultado espectacular.
Me ha gustado mucho el resultado, a lo mejor me equivoco (tampoco quiero ir de sobrada) pero como confío en mi buen gusto y en la opinión de mi peque que quedo maravilla y se ha comido unas cuentas, creo que con esto ya tengo suficiente.
Por cierto, mañana me toca trabajar (si algo quieres...algo te cuesta) por eso he pensado regalar estas galletas a mis clientes que pasen por el stand de Tape Pink, creo que será un dulce regalo, ¿nos os parece?
Y hablando de Ikea, ayer me llego un chiste por wasap que me hizo mucha gracia:
"Cariño, te veo un poco agobiado, nos vamos de Ikea?
" ¿Qué cajones dices?"
"Vale, nos vamos"
"No me digas estanterías"
Jjejje ¿Chiste o realidad? Ayyy eses sabados en Ikea como hecho de menosssss
besossss,