Ingredientes para 4 personas:
- 350 gr. de garbanzos
- 1/2 butifarra blanca.
- 1/2 butifarra negra.
- 1 morcilla de arroz.
- 1 vaso de vino blanco.
- 1 cebolla.
- 2 patatas.
- 2 dientes de ajos.
- 3 hojas de laurel.
- 1 cabeza de ajo.
- 1 trozo de calabaza, 300gr. aprox.
- 2 cucharadas de tomate frito.
- 1 rebanada de pan tostado.1 punta de jamón.
- 2 cucharaditas de pimentón.
- Aceite, agua y sal.
Ponemos una cazuela con agua, las hojas de laurel, la cabeza de ajo entera y una punta de jamón. Cuando empiece a hervir, echamos los garbanzos, lavados y escurridos ( no excederse con el agua para que no queden caldosos).
Lo cocemos a fuego lento, hasta que estén tiernos, el tiempo depende si es olla exprés o común. Una vez cocidos retiramos la cabeza de ajo y la punta de jamón.
Preparamos el sofrito, colocando aceite en una cazuela plana o una sartén grande, añadimos la cebolla y un diente de ajo todo picado y lo sofreímos.
Añadimos las patatas y la calabaza cortadas a cuadrados, doramos todo e incorporamos las butifarras, la morcilla a trozos y le tiramos por encima las dos cucharaditas de pimentón.
Agregamos el vaso de vino y removemos dejando que evapore el alcohol y a continuación le añadimos las dos cucharadas de tomate frito (yo siempre tengo un poquito en la nevera hecho por mi).
Preparamos una picada con el pan tostado, un diente de ajo y las almendras tostadas y lo majamos en el mortero, añadiendo la picada al sofrito y removemos.
Añadimos el sofrito a la cazuela de los garbanzos que tienen que estar con poco caldo y lo cocemos todo unos minutos para que se mezclen los sabores y listo.
Un plato de cuchara muy completo que espero os guste.