Hoy nos acercamos a cenar a los bajos del estadio de El Molinón, concretamente a uno de los primeros locales abiertos tras la reforma del estadio, el Hat Trick.
Es impresionante como la reforma del estadio, ha generado unos espacios, entre otros, para la hostelería, dando unos nuevos usos y aspecto a una zona que hasta hace nada, estaban desiertos. Hoy en día a cualquier hora del día puedes ver las terradas con gente y los locales animados, y si vamos a hora del vermú o de futbol en la televisión, más vale que ni os arriméis.
El local del que hoy hablamos es un local amplio, situado en la esquina del fondo sur y grada este del estadio, con un comedor en la parte superior, terraza, y lo más cómodo para toda esta zona, el parking del estadio.
Tiene una carta ajustada y variada, para cubrir cualquier antojo, y de la que pude probar los siguientes; Croquetas de jamón, bien de sabor y sabrosas, calamares fritos, bastante aceptables, y parrillada de carne. Está pensada para dos personas, y es bastante abundante. Tiene criollo, chorizo rojo, picaña de buey, secreto, y viene acompañada de patatas fritas, pimientos morrón, del padrón y salsa chimichurri.
Para beber tomamos un Ribera del Duero, Ecológico, dominio Basconcillos, bastante rico, y un blanco Riesling alemán, Kerpen, de la zona Mosel-Saar-Ruwer, muy afrutado y bastante dulce comparativamente con los blancos españoles más clasicos, muy rico.
Todo esto con algo de pan y dos de agua por 162 €, teniendo en cuenta que éramos seis adultos y tres niños.
La atención fue perfecta y muy amable, y el servicio también. Nota para el gerente: Recomiendo rebajar la intensidad de los ambientadores de canela de los baños
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