Las jornadas celebradas en el Mercado Municipal de Flix han demostrado que tradición y vanguardia van de la mano en las elaboraciones más dulces
La cocina dulce y la pastelería han encontrado en Flix un escenario inmejorable para brillar y para ensalzar la labor de los profesionales que, sin dejar de mirar a la tradición, innovan en cada una de sus elaboraciones. Y es que, del 20 al 22 de octubre, el Mercado Municipal de Flix ha albergado GastroDolç, unas jornadas en las que se ha podido ver en directo cómo crean sus dulces creaciones figuras de la talla de Oriol Balaguer, Pau Carrana, Gessamí y Clàudia Caramés, Víctor Torres, Mar Ibáñez, Josep Esturi, y los hermanos Font. Postres, cocas, helados, y creaciones gastronómicas dulces, que han transportado a los espectadores a un viaje entre lo conocido y lo inesperado, entre el ayer, el hoy y el mañana.
Toni Vera y Jordi Butrón en GastroDolç Flix 2024. © Eric Artigas (The White Cat Studio)Jordi Butrón y la esencia del postre de restaurante
Todos los ponentes han brillado con luz propia en GastroDolç Flix 2024, pero, sin duda, ha destacado la intervención de Jordi Butrón, una de las figuras más relevantes de la pastelería creativa en España y fundador de Espai Sucre. Para Butrón, el postre no es solo un plato más; es un territorio aún por explorar. “Mis tres obsesiones siempre han sido defender el papel del chef pastelero, hacer pedagogía del producto y del ingrediente, y destacar la importancia del proceso creativo”, explicó. La filosofía de Butrón quedó patente en su intervención, en la que reivindicó no solo el postre de restaurante, sino también la importancia de encuentros como GastroDolç, “un monográfico dedicado al mundo dulce en un mercado auténtico, lleno de productos de proximidad”.
Toni Vera rellenando croissants, en GastroDolç Flix © Eric Artigas (The White Cat Studio)Butrón compartió protagonismo en la última jornada de GastroDolç Flix con el maestro Toni Vera, tricampeón del Mejor Croissant de Mantequilla de España, quien ofreció una cátedra sobre los secretos del hojaldre perfecto. Toni, además, se metió al público en el bolsillo con su simpatía y con su amplia gama de rellenos que usó para los mejores croissants del país.
Asimismo, el anfitrión, el pastelero local, Pau Carranza deleitó al público mostrando cómo el Mejor Pan de Sant Jordi de 2024 se elabora con precisión y pasión.
Un abrazo entre tradición y modernidad
Uno de los momentos más emotivos fue protagonizado por los hermanos Font, expropietarios del icónico restaurante Sa Punta de Pals, quienes revivieron clásicos como los “taps de Cadaqués” y la butifarra dulce del Empordà. Los veteranos chefs no solo ofrecieron un espectáculo culinario, sino también una lección: los postres clásicos, esos que se terminan en la sala, son una joya que merece ser redescubierta y celebrada en toda España.
Oriol Balaguer, en GastroDolç Flix. ©Acevedo ComEste enfoque hacia la tradición no fue un acto aislado, sino el latido constante de GastroDolç Flix. Las sesiones se articularon en torno a la idea de que la innovación culinaria no es posible sin la solidez de las raíces. Así lo demostró también Oriol Balaguer, quien inauguró el certamen con una oda a la “excelencia de la pastelería creativa”, marcando un equilibrio perfecto entre sofisticación y cercanía.
Cocina dulce, producto local y más allá
El evento, que celebró su séptima edición en las Terres de l’Ebre (antes denominado GastroEbre), ha sabido mantenerse fiel a sus principios: promover la gastronomía local, incentivar la innovación y resaltar el valor del producto de proximidad. Así lo hicieron las hermanas Gessamí y Clàudia Caramés , que mostraron cómo el aceite de la DOP Oli Terra Alta puede transformarse en un sorprendente protagonista de postres y cócteles.
Las hermanas Caramés, en GastroDolç Flix © Eric Artigas (The White Cat Studio)Las Terres de l’Ebre han sido, una vez más, el escenario perfecto para un certamen que fusiona gastronomía y territorio, tradición e innovación. GastroDolç Flix no solo es un evento, es una experiencia sensorial que eleva la cocina dulce a un nivel de respeto, pasión y reconocimiento.
Postres de restaurante
Otro de los ejes vertebradores de GastroDolç Flix ha sido la cocina dulce, es decir, los postres de restaurantes. Los han reivindicado, desde el mencionado Butrón, hasta grandes profesionales con estrella, como Josep Esturi, chef pastelero en el Hotel Mandarin Oriental 5* GL. Esturi reveló algunos de los secretos de su día a día elaborando postres de vanguardia en los diferentes puntos de restauración del hotel.
También hicieron un gran despliegue de creatividad y de sofisticación Víctor Torres, Jesús Chávez y Xavier Busquets, de Les Magnòlies* y Quirat*. Los chefs versionaron tres postres típicos de nuestra cocina: “mel i mató”, el músico y un “xuixo” relleno. Una demostración de cómo la innovación puede inspirarse en la tradición.
De la misma manera, Mar Ibáñez, pastelera del restaurante Aürt* y ganadora del Best Dessert de Espai Sucre 2023, demostró que la cocina dulce es una continuación del menú, por lo que también aprovecha ingredientes y productos de la cocina salada.
Por otro lado, Paula Domènech, profesora de pastelería en el CETT-UB, llevó al escenario de Flix una reinterpretación del pastisset, una muestra más de que la tradición está más al día que nunca.
Llorenç Peral, Josep Font, Pau Carranza, Toni Vera, Jordi Butrón, Jordi Guillem y Jaume Font.Y es que, hay clásicos que nunca pasan de moda, como los bombones. El pastelero local Llorenç Peral, de la Pastisseria Els Perxis de Flix, lo dejó claro con su sesión de bombonería con productos locales, mientras que la heladería creativa llegó de la mano de Jordi Guillem, que presentó una sesión con el arroz del Delta del Ebro como ingrediente protagonista de los postres.
GastroDolç Flix también ha tenido otro protagonista básico: el pan y las cocas de “de forner”, que trajeron Jaume Sistaré, del Forn de Pa Sistaré de Reus, y Eduard Verdaguer, de Panàtics.
Tres días únicos
Tras tres días intensos, GastroDolç Flix 2024 se despidió con la certeza de haber dejado una huella indeleble en los corazones —y paladares— de los asistentes. No es solo la demostración de la excelencia de los profesionales que han participado, sino también la reafirmación de que la pastelería y la cocina dulce tienen mucho que contar y que ofrecer, tanto en el presente como en el futuro.
Para los que se dedican al arte del dulce, GastroDolç Flix ha sido un escaparate perfecto para mostrar sus creaciones y su compromiso con la tradición y los productos de proximidad. Para los asistentes, una deliciosa oportunidad de saborear lo mejor de la pastelería en un rincón genuino de las Terres de l’Ebre, donde la tradición sigue marcando el paso, pero la innovación no deja de avanzar.