Media Columna de Jorge Morelli. (Blog de Jorge Morelli).
GATO POR LIEBRE.
El presidente, Ollanta Humala, considera que pecan de soberbia quienes piden su presencia en el diálogo, y vuelve a mandar a los líderes de los partidos a conversar con humildad donde el Premier.
Pasando gato por liebre, ofrece la excéntrica afirmación siguiente: “el primer ministro, por ser jefe del Consejo de Ministros, es una autoridad tan importante como el presidente y los presidentes de todos los poderes del Estado”. Es falso, desde luego. Tanto en la forma –que seguramente incomoda a los presidentes de los demás poderes- como en el fondo. Es fácil demostrarlo. Solo el presidente puede avalar las conclusiones de un diálogo como el que pide, porque solo el mandatario dura los cinco años en el gobierno. Los primeros ministros no duran cinco años, y a este premier en particular nadie le ve aire más allá del fin de este.
El Presidente añade otra declaración igualmente extraña: que no participa del diálogo porque, siendo líder de su partido, “su función podría ser malinterpretada”. ¿Cómo podría malinterpretarse la convocatoria presidencial? ¿Podría creer algún confundido que es convocado por el líder de Perú Posible?
Es forzoso preguntarse entonces si la convocatoria fue una jugada para aislar a la oposición –la única, la fujimorista-, en la creencia de que no concurriría al diálogo, o de lograr que bajara la guardia si concurría.
Si es así, el recurso ha resultado fallido. El fujimorismo no ha bajado la guardia en lo más mínimo. ¿Es esta de hoy una provocación para que la oposición patee el tablero? Seguramente el fujimorismo no dejará de concurrir si es invitado.
A pesar de sus protestas de fe, entonces, es forzoso sospechar que el Presidente puede estar tratando ahora de sabotear disimuladamente un diálogo que nunca fue idea suya, que no le sirve de nada y que más bien le quita margen de acción y le resta poder.
FUENTE: BLOG DE JORGE MORELLI. http://www.expreso.com.pe/blogs/jorge-morelli