Revista Cultura y Ocio
Recuerdo que tenía veinte años cuando me fui de casa, a la aventura, sin trabajo fijo, ni contrato, ni coche ni nada (eran otros tiempos ¿?). Vivía de alquiler junto a mi primo en un piso genial en el mismo centro de Valencia, tabajaba de D.J., camarero y encargado en un emblemático un local de copas de la noche levantina. Mi primo y yo somos unos fanáticos coleccionistas de música, él ademas, es un músico excepcional, recuerdo que cada viernes repetíamos el mismo "ritual de preparación", antes de ir al trabajo, que ademas era una fiesta continua. Mientras nos esforzábamos por no quemar la ropa con la plancha, limpiabamos nuestras botas, nos duchabamos y perfumabamos adecuadamente (según presupuesto mensual)...nos regalábamos los oídos con un invariable surtido de temas que preparaban nuestro ánimo para la gran noche que estaba a punto de llegar, entre los vinilos que nunca fallaban en el plato, se encontraban "Rock this Town" de Stray Cats, "Si, si, nena" de Bruno Lomas o "Adrenalina" de los Rebeldes... y en las ocasiones en las que la noche prometía ser especial, un tema nos daba el punto de chulería y estilo que necesitabamos antes de salir de casa, aquel tema, aun sonando en un radio-casette de coche y entonado por mi inglés aprendido de chapurrear viejas canciones, marcó profundamente una de las épocas mas divertidas y emocionantes de mi juventud. Aquella canción influiría también una generación de Rockeros y, como pasó en 1968 con "Born to be Wild" de los Canadienses Steppenwolf, se convertiría en banda sónora obligatoria para cualquier imagen de moteros, chupas de cuero y rockeros en general, os hablo evidentemente de "Bad to the bone" y de sus artifices "George Thorogood and the Delaware Destroyers"...
De la vida privada y personad de George Thorogood no se conoce demasiado, el artista guarda con celo todo lo relativo a su intimidad y tan sólo han trascendido algunos apuntes biogáficos, intentando respetar al máximo esta premisa, vamos a dibujar el perfil de este gran músico estadounidense. Nacido en Naamns Manor, un barrio de las afueras de Wilmington (Delaware) a principios de 1950, nacido el tercero de cinco hermanos, al joven Geroge siempre le interesó la música, aunque no particularmente el Blues, se crió escuchando Rock & Roll, siempre fue un buen deportista, en especial destacaba en el béisbol, deporte al que se dedica semi-profesionalmente a principios de los 70. Unos años antes había vivido una experiencia que le combaría la vida, acude junto a unos amigos a ver una grabación del bluesman John Paul Hammond en Chicago, a partir de ese momento su concepto de la música cambia radicalmente y comienza a soñar un estilo propio. Tres años mas tarde, junto a Michael Levine al bajo y Jeff Simon a la batería, forma "the Delaware Destroyers".
Comienzan a abrirse camino en el mundo de la música con claras influencias de gente como Willie Dixon, Muddy Waters, Howlin' Wolf, Chuck Berry o John Lee Hooker, aunque su sonido tiene un sello propio, un dinamismo y una potencia endiablada, que fusiona el Blues y el Rock de manera contundente. A mediados de 1974 ya se habían recorrido todo el circuito de locales de Rock y Blues desde Delaware hasta Boston, donde deciden establecerse con la intención de colar sus maquetas en alguna discográfica. En una de aquellas actuaciones consiguen llamar la atención del productor John Forwad, que les consigue un contrato con Rounders Records, y así graban su primer álbum homónimo "George Thorogood & The Destroyers" , aunque se registró en 1975 no se pondrá a la venta hasta dos años después, las razones de este retraso se atribuyen a diversos factores, problemas, algunos cuentan que a George no le gustaba la portada, otros que la compañía no lo veía claro, y otros que el sonido del bajo no era bueno...bien, es posible, ya que Michael Levine es sustituido durante este periodo por otro músico más contundente, Bill Blough. Este disco incluye una genial versión de un tema que popularizó John Lee Hooker en 1966 "One bourdon, one scotch, one beer", y que fue incluido en un capítulo de "los Simpsons", aumentando así la popularidad del grupo.
Con su siguiente disco "Move it over" la banda consolida su potente sonido, consiguen entrar en las listas de éxitos, su fama comienza a llegar a Europa e incluso alcanzan el disco de oro. Con la incorporación en 1980 del prestigioso saxofonista Hank Carter, la banda da un paso mas allá, alcanzando un nivel de vigor y calidad sonora impresionantes. La popularidad les lleva a una gira maratoniana de 50 días en 50 estados, donde llenaron en todas y cada una de las actuaciones. Tal éxito llama poderosamente la atención de una de las "majors", la poderosa EMI, que les graba el que será su trabajo más recordado "Bad to the bone" (1982), en manos de una gran compañía las cosas van de otra manera, el video de "Bad to..." se emite diariamente en la MTV, además de incorporar el tema en la BSO de la película "Christine" (John Carpenter, 1983), lo que les lleva a la cima de la popularidad de manera vertiginosa, manteniendose durante un año completo entre los más vendidos, años después y con otro film ("Terminator 2, Judgment day", James Cameron 1990) el mítico tema pasa ser ya parte de la historia de la música y de cine.
A partir de ese momento, y hasta nuestros días, la banda graba un disco cada dos o tres años, sin prisas, acompañandose de grandes músicos como Albert Collins, Bo Diddley, J. Lee Hooker...Combinando su personal estilo tanto en el Blues, el Rock, el Boogie o incluso el Country, despues de tantos años conserva ese "feeling" alucinante que hizo de su profunda y rota voz, una estrella algo fuera de lo comercial, un talento único y, aunque popular, un desconocido. Se sabe que le gusta la cerveza, el whisky, aunque no en exceso, muy propio de un deportista, la vida familiar y por supuesto el béisbol. Que George Thorogood es un gran músico no cabe duda, tal vez si fuera un drogadicto, un "rebelde" o hubiera muerto en trágicas circunstancias, hoy sería un mito como lo es Stevie Ray Vaughan, pero sigue vivo y en activo, quizás esto no sea propio de una Rock-Star, pero nosotros se lo agradecemos... enormemente...