Georges Ward y Cristobal Toral: el realismo onírico y nostálgico

La “provincia” ofrece a veces sorpresas inesperadas y por lo tanto mayormente atractivas; esto me pasó en Zaragoza cuando vi los carteles de dos exposiciones (no fotográficas) que atrajeron mi curiosidad y, una vez más, mi intuición me llevó por el camino correcto… estaban a unos 300mt la una de la otra…

La de Cristobal Toral (Cádiz, 1940) en el precioso espacio del Palacio de Sástago, se titulaba “La huella de un recorrido”, siendo una retrospectiva de su trayectoria artística pero a la vez porque presentaba unas pinturas y una instalación en las cuales predominaban las maletas, el tren, el adiós; una constante metáfora que concibe la vida como un viaje, un tránsito, un trayecto, lleno de nostalgia hechas de cosas cotidianas y de separaciones. También un homenaje a quien tiene que emigrar para buscar un futuro mejor. A posteriori descubrí más de este consagrado artista que hasta ha escrito una autobiografía titulada “La vida en una maleta” (una vez más las maletas, su obsesión!), publicada por Tomas de Hoy y con prólogo de Mario Vargas Llosa!

La de Georges Ward (Zaragoza, 1971) en la sala Luzán de la Obra social de la CAI, se titulaba “Life System” y era un homenaje colorista, hiperrealista, onírico a la Naturaleza que se muestra como un mundo paralelo que se desvela a nuestros ojos, repleto de flora y de fauna exuberante y riquísimas de particulares; cada elemento de un cuadro, tenía su propia luz y estaba puesto en la imagen global a través de una escenografía teatral. Una característica muy peculiar de los cuadros de Ward es la precisión casi maniática en representar insectos cuyos modelos reales están en la colección del entomólogo Aragonés Ernesto Navarro.

La obra que me ha dejado sin palabras es una que se llama “Natura” en la cual están representadas con minucia de particulares, más de 450 especies de animales y plantas. A continuación se propone una galería de imágenes de las obras de los dos artístas.