…la importancia de los gestos en los personajes.
Imaginemos que ya estamos metidos en el planeamiento de nuestro escrito, describimos a nuestro personaje. Pero ¡atención! No podemos pasar por alto que nuestros personajes no solamente hablan con la boca sino que fundamentalmente se expresan por gestos faciales y corporales. Esto lo saben muy bien los políticos que en sus comparecencias en TV dan mayor importancia a lo que dicen sus cuerpos que a lo que verbalizan. Más aún, igual que en la educación el ejemplo de los padres enseña más que las palabras que dicen a sus hijos, de la misma forma los personajes pueden hablar más por sus actitudes y gestos que con sus expresiones verbales.
No olvidemos que cinésica o kinésica es la rama de la teoría de la comunicación que estudia las expresiones faciales, gestos, movimientos y posturas. Hay verdaderos expertos en esta materia que estudian cómo los sentimientos se manifiestan mejor por el cuerpo que con la boca.
Se han hecho estudios que demuestran que un emisor que se contradice corporal y verbalmente suscita un rechazo o una duda instintiva por parte del receptor. Por ese motivo hay verdaderos expertos en “engañar” modificando sus gestos para dar verosimilitud a lo que dice con palabras.
Actividades propuestas:
- Fíjate en esta situación: Una chica estudiante de un instituto que va muy mal en los exámenes y quiere mostrar a sus padres que lleva bien la evaluación para que no la castiguen, pero… decide contarlo todo a sus padres porque no quiere mentir.
- Lo dice a la hora de la comida y con una sonrisa de oreja a oreja, abriendo mucho los ojos y con satisfacción.
- Lo dice nada más llegar a casa con los ojos medio cerrados, mirando hacia abajo y con seriedad.
- Lo dice cuando sale para el instituto como si no tuviera importancia, colocándose el cuello de la camisa y mientras rebusca en los bolsillos el billete del autobús.
- ¿En cuál de las tres circunstancias sería más creíble?
2. Escribe otra situación distinta en la que no concuerde la palabra con los gestos.