Glutamina: ¿es eficaz? ¿sirve? ¿en qué casos?
Muchos fabricantes de productos con glutamina indican que tiene efectos protectores del sistema inmune y prevención de infecciones, mejora de la función intestinal, retención de fluido intracelular (lo que produce efecto voluminizador), absorción digestiva de agua más ràpida, estimulación de la síntesis proteica y crecimiento muscular, reducción de agujetas, mejora de recuperación o mejora en ejercicios de alta intensidad.¿Qué hay de cierto en todo esto?
Evidencia sobre los efectos de la suplementación con glutamina
La glutamina (L-glutamina) es el aminoácido más abundante en el plasma y músculo esquelético. Se encuentra en niveles de 550 a 750 mmol/L en personas descansadas bien alimentadas.A través de la dieta, una persona que consuma de 0,8 a 1,6g de proteína / día consume de 3 a 6 g de glutamina diaria. Los atletas suelen tener un consumo mayor ya que tienen aporte extra a través de suplementos proteicos, hidrolizados de proteína y aminoácidos.
Este nutriente juega un papel muy importante en la regulación y expresión de genes, metabolismo proteico, función oxidativa, metabolismo de nutrientes, inmunidad y equilibrio ácido base.
La concentración de glutamina plasmática está relacionada con la síntesis proteica y hay alguna evidencia que apoya el hecho de que la glutamina promueve la síntesis de glucógeno, aunque se desconocen los mecanismos.
Es fuente de energía para leucocitos (principalmente linfocitos) y juega un papel importante en la síntesis de proteínas, producción de citoquinas y adecuada función de los macrófagos. De hecho la glutamina es considerada un nutriente esencial para los linfocitos y otras células de rápida división celular como las de la mucosa digestiva y la médula ósea.
El músculo esquelético es el principal tejido productor de glutamina. La glutamina se sintetiza a partir de amonio NH3 y glutamato por la enzima glutatión sintetasa. Los leucocitos no poseen glutatión sintetasa para fabricar glutamina.
Bases de la suplementación con glutamina
El ejercicio muy prolongado está asociado con disminuciones de hasta el 20% de glutamina en plasma y los períodos de entrenamiento muy pesado están asociados con disminución crónica de glutamina por lo que se ha presupuesto que una caída tan pronunciada puede conducir a inmunodepresión y mayor riesgo de infecciones, especialmente del tracto respiratorio superior.Puesto que sus niveles descienden con el ejercicio y son fuente de energía de células de defensa, se propone que su suplementación restaura los niveles sanguíneos y mejora la respuesta inmune frente a aquellos que no se suplementan.
Para algunas personas, las disminuciones de glutamina plasmáticas podrían considerarse como síntoma de sobreentrenamiento.
Aminoácido glutamina
Suplementación con glutamina en estados patológicos
La glutamina tiene varios efectos demostrados en situaciones patológicas graves como quemados y otros pacientes críticos.Quemados
La suplementación con glutamina mostró ser eficaz para reducir la mortalidad al reducir la infección de microbios gram negativos en pacientes quemados. La suplementación parenteral ha sido asociada a una reducción del 11% en la mortalidad aunque no significativa. Las infecciones si se redujeron significativamente así como la estancia, en 2,35 días.Pacientes críticos
La administración de una fórmula de nutrición enteral enriquecida con 30,5g /100g de proteína resultó en una disminución significativa de la incidencia de neumonía, bacteriemia y sepsis en pacientes críticos en comparación con el control (3,5g / 100g)La infusión intravenosa de dipéptido de glutamina como L-alanil-glutamina (0,285g /kg / día) redujo la tasa de mortalidad en pacientes críticos.
La suplementación con glutamina (0,4g/kg/día) en nutrición parenteral total disminuye sinificativamente los leucocitos y por consiguiente la inflamación en pacientes con síndrome de respuesta inflamatoria sistémica.
Quimioterapia y cáncer
Una revisión encuentra que la suplementación con glutamina es segura y puede contribuir a disminuir los riesgos de altas dosis de quimioterapia y radiación. Esto se piensa es debido a un déficit que se produce, y que al ser restaurado mejora la recuperación. No obstante, puesto que in vitro se conoce que las células cancerosas prefieren usar glutamina como fuente de energía, los oncólogos no proporcionan glutamina por el posible riesgo, si bien no existe evidencia de que ocurra in vivo. Otros estudios muestran que un aporte de glutamina exógena es segura y puede disminuir los riesgos de altas dosis de quimioterapia y radiación.Enterocolitis infantil
La suplementación de 0,3 g /kg / día mostró efectos beneficiosos en la integridad intestinal y la incidencia global de enterocolitis necrotizante y septicemia en bebes pretérmino.Suplementación con glutamina, función inmune e infección
Estudios muestran que la suplementación con glutamina durante y tras 2 horas de ciclismo, no pudo impedir la disminución de la actividad de los linfocitos.Suplementación con glutamina y ejercicio físico
Los atletas de resistencia pueden experimentar estrés fisiológico, que está asociado a una inmunodepresión temporal y mayor riesgo de infección, especialmente de tracto respiratorio.Mientras que se ha observado aumentos de glutamina plasmática tras ejercicio de alta intensidad y duración menor de 1 hora, hay bastante evidencia que apoya que los niveles disminuyen con ejercicio muy prolongado:
Los niveles plasmáticos de glutamina disminuyen de 557 a 470 mcmol/L tras 3,5 horas de ciclismo al 50% VO2 máx. Alcanza el mínimo de 391 a las 2 horas de recuperación y permanece baja hasta 4,5h de recuperación.
El contínuo declive de los niveles de glutamina incluso en recuperación, se supone es debido a la demanda aumentada hepática de glutamina para la síntesis de glucógeno.
24 clubs de maratonianos han reportado cambios en la concentración de glutamina plasmática de 592 mcmol/L pre carrera a 495 al terminar.
Los niveles plasmáticos de glutamina en reposo tienden a ser menores en personas crónicamente fatigadas o sobreentrenadas en comparación con atletas bien entrenados y personas sedentarias. Se han observado niveles de 330 a 240 mcmol/L en atletas de élite crónicamente fatigados.
Hasta 2012 tan sólo un estudio muestra efecto protector de la glutamina frente a infecciones del tracto respiratorio superior, observándose un 32% menos de incidencia a aquellos que ingirieron 5g en 330 ml de agua en los días posteriores a un maratón.
La mayoría de estudios fallan al demostrar efecto beneficioso cuando se suplementa glutamina para mantener los niveles plasmáticos durante el ejercicio y no se ha podido demostrar relación directa entre disminución de glutamina en plasma y cambios en el sistema inmune.
Otro muestra que la suplementación con L-alanyl-L-glutamina,si bien se ha realizado con solo 10 voluntarios y el estudio obtuvo fondos de la marca.
Un estudio muestra un aumento del 10% del bicarbonato plasmático tras 90 min de la ingesta de 16 a 36 mg / kg de glutamina, si bien otro estudio controlado con 30 mg / kg no encuentra ningún efecto beneficioso en el equilibrio ácido base ni mejora en la fatiga en ciclistas a VO2 máx.
Existe cierta evidencia de que la glutamina ayuda a la síntesis de glucógeno en las primeras horas de recuperación post ejercicio, si bien se calcula que es dependiente de la ingesta de hidratos de carbono:
Una ingesta postejercicio de 100g de hidratos de carbono con 20g de proteína ha mostrado ser la mejor estrategia para promover la síntesis proteica y de glucógeno.
Consumir un 6% de hidratos de carbono durante el ejercicio, típicamente una bebida energética, mantiene los niveles de glucosa sanguínea.
Un estudio realizado con levantadores de peso no observó diferencias en el número de repeticiones máximas en personas suplementadas.
Dosis, tolerancia y riesgos
Dosis de hasta 0,65g / Kg en solución han sido toleradas y no han resultado en niveles de amonio plasmáticos anormales.Tampoco suele producir intolerancia en dosis de 20 a 30g en varias tomas en pocas horas.
Su uso está desaconsejado en pacientes con enfermedad renal.
Conclusiones
En general, la suplementación con glutamina reduce las tasas de infección, inflamación, estancia en el hospital y mortalidad y mejora la función de la barrera intestinal y función inmune, especialmente en inmunidad celular de pacientes críticos.La suplementación parenteral en pacientes críticos reduce las infecciones, duración de estancia hospitalaria y mortalidad. Si bien algunos estudios muestran una reducción significativa en la mortalidad, otros no.
Podría mantenerse la concentración plasmática de glutamina con un moderado aporte de carbohidratos durante el ejercicio. Se recomienda seguir una dieta bien balanceada que para la mayor parte de deportes debe incluir un 60-75% de hidratos de carbono, bebiendo bebidas energéticas durante el entrenamiento, ya que ha demostrado atenuar algunos de los efectos inmunosupresores del ejercicio prolongado. Consumir de 30 a 60g de hidratos de carbono por hora durante un ejercicio intenso sostenido disminuye el aumento de cortisol y parece limitar el grado de depresión inmune inducida por el ejercicio.
Los efectos propuestos por los que principalmente se toma glutamina (mejora del sistema inmune, efecto anticatabólico o aumento de síntesis de glucógeno) tienen poco apoyo en la bibliografía de estudios controlados en humanos sanos.
Varios estudios concluyen que no existe hasta la fecha evidencia que relacione baja concentración de glutamina plasmática y mayor susceptibilidad de infección en atletas.
La mayoría de estudios no encuentran que los efectos de mantener las concentraciones de plasma durante el ejercicio y en recuperación mejoren los marcadores de respuesta inmunológica y que la suplementación no impide el continuado descenso de glutamina plasmática incluso tras el ejercicio.
La evidencia no apoya una el papel de baja concentración plasmática de glutamina en la etiología de la depresión inmunológica.
El consumo de glutamina es poco probable sea beneficioso en términos de restauración de fluidos o prevención de inmunodepresión tras el ejercicio, aunque existe cierta evidencia de estimulación el proceso anabólico incluyendo síntesis de glucógeno y síntesis proteica.
No existe evidencia suficiente que apoye el uso de glutamina como suplemento en atletas.
Si bien algunos atletas pueden verse favorecidos por la ingesta extra de antioxidantes, debe subrayarse el peligro de la sobredosificación e ingesta excesiva. De hecho muchos micronutrientes ingeridos por encima de ciertas dosis tienen efectos inmunosupresores.