Revista Diario

Gracias

Por Mamaenalemania
Iba a ponerme a despotricar sobre lo desagradecida que es la gente en general.
Esta vez no se trata de ninguna anti-alemanada de las mías, sino más bien de algo que tiene que ver con este blog en sí.
Como sabéis, dispongo de una dirección de correo para que, el que quiera, se comunique conmigo en “privado”. Tampoco es que me lleguen e-mails todos los días, pero sí que de vez en cuando, alguien decide escribirme.
Suele ser gente:
- En mi misma situación (viviendo en Alemania, casadas o no, con hijos o no) que prefieren comentar algo en privado. Normalmente suele ser gente sorprendida por la “coincidencia” en las vivencias y las sensaciones. A veces cuentan una anécdota de sus vidas en relación al post motivador, a veces no.
- A los que les gusta el blog y quieren felicitarme por ello (de momento no he recibido amenazas ni opiniones negativas por email, lo cual me agrada).
- Que tiene alguna pregunta concreta: Nacionalidad de los hijos, burocracia, ayuda/opinión sobre algún tema concreto (vacaciones en Alemania, búsqueda de casa…etc.)
Yo siempre contesto a los e-mails. Siempre. Aunque no tenga ni idea del tema en cuestión, aunque sólo sea para aconsejar dónde podrían seguir buscando, aunque sólo sea para dar las gracias y decir que me alegro de que les guste el blog. Obviamente, llega un momento que la comunicación se “corta” o decae. Si no se cortase, estaríamos escribiéndonos e-mails eternamente. A veces soy yo la que no contesta más, a veces es la otra persona.
En cualquier caso, por e-mail no dejo a nadie con la palabra en la boca.
Me sienta fatal (pero mal mal) después de haberme tirado un buen rato escribiendo una parrafada informativa sobre cualquier tema, no recibir ni un mísero “gracias”. Nada más, no hay que explayarse más, simplemente tomarse un momento la molestia de dar al botón de “responder” y escribir la palabrita dichosa.
Precisamente me sienta mal porque ese tiempo invertido en contestar por privado, se lo he restado al (poco) tiempo del que dispongo para contestar a los comentarios en el blog. O para dejar comentarios en blogs que sigo. Y para colmo, como se sobra tiempo (irónico, por supuesto), me he abierto otro.
Reconozco que no es una excusa demasiado convincente. Hay blogueros que se toman la molestia de contestar a cada uno de los comentaristas de sus posts (y que admiro profundamente) y hay otros que, consecuentemente, no contestan a ninguno (con lo que nadie se ofende o se siente de menos, porque total, no contesta nunca).
Yo eso lo hago fatal: Hay veces que contesto, otras que no, otras que contesto sólo a algunos…etc.
Tampoco dejo comentarios en todos los blogs que sigo (y leo). No porque no tenga nada que decir, pero es que hay veces que voy a dejar un comentario y veo que ya han dejado 50 y me desanimo o pienso “pfff… mejor contesto cuando haya leído todos los comentarios”, o contesto (entre croqueta y croqueta) y me olvido o no veo que hay que introducir la clave dichosa, por lo que al final, cuando me acuerdo, la meto, no me la coge, se me está quemando la croqueta, lo dejo, el niño está mordiendo mi móvil…etc. y acabo cerrando el portátil y abandonando la misión comentarista.
Soy un desastre, lo sé.
Así que este post es para daros las gracias a los que comentáis. Os leo a todos, aunque no conteste siempre. Y no sólo eso, es que además agradezco un montón cada comentario, por escueto que sea, porque sin ellos lo más seguro es que hubiese abandonado el blog (que aunque me encanta hablar, no me gustan los monólogos).
Gracias, gracias, gracias y mil gracias.

Volver a la Portada de Logo Paperblog