Por Gastón del Torto / @g_deltorto
Hay que festejar pero no desesperarse
“No jugó contra nadie” y “no es un rival para tener en cuenta” serán seguramente las frases de cabecera de algún sector del público mañana. Ahora la pregunta es ¿Bolivia sí lo era? Si se conseguía la victoria ¿Hubiera sido valorada? No creo. Es cierto que Costa Rica no es un seleccionado fuerte, incluso bastante menos que Argentina. Pero hasta hace unos días era de temer. Porque sí pudieron ganarle al equipo de Gustavo Quinteros y también por el rendimiento del conjunto nacional en los últimos partidos.
Esta noche, el conjunto de Sergio Batista dio una vuelta de timón que terminó llegando en un momento acertado. Salieron Carlos Tevez y Ezequiel Lavezzi, los dos “autitos chocadores” del equipo en los primeros partidos. Además de Ever Banega, quien tampoco había tenido buenos rendimientos.
Con el ingreso de Fernando Gago, Gonzalo Higuaín y Sergio Agüero, el seleccionado volvió a tener algo del vuelo futbolístico que mostró, por ejemplo, en el primer tiempo frente a Estados Unidos. Sin maravillar le alcanzó para derrotar al equipo de Ricardo La Volpe por 3-0, con dos tantos de Sergio Agüero y uno de Ángel Di Maria. Aún así se notó claramente que Argentina sigue siendo un cúmulo de individualidades y el encargado de unir esas pequeñas ramificaciones es justamente Lionel Messi.
Hoy, el fenómeno mundial fue la figura que siempre es. Aquel que nunca juega mal, que tiene partidos regulares, buenos, muy buenos y soberbios. Dejó en claro cuan ilusa es la gente que lo insulta y menosprecia su habilidad y porqué es único en el planeta. Esta vez se desempeñó como enganche creativo más que como goleador. Estuvo muy preciso con la pelota y puso, al menos, diez pases gol a lo largo del partido. La poca efectividad de Agüero pero más aún de Higuaín imposibilitaron la goleada. A pesar de eso ambos delanteros también tuvieron un muy buen partido y justificaron su inclusión entre los titulares. Supieron moverse en el ancho del terreno para evitar la marca y lo hicieron correctamente.
También fue importante el trabajo de Gago, puntualmente en el primer tiempo; controlando la pelota, repartiendo el juego a las bandas y juntándose con Messi más cerca del área donde Costa Rica se cerró bien. Asimismo, Pablo Zabaleta tuvo un partido aceptable. Pasó bastante y criteriosamente al ataque.
El partido en sí no fue un trámite pero mucho más abierto de lo que se suponía. Los jugadores centroamericanos no impusieron una marca férrea por lo que los volantes argentinos tuvieron libertades para trasladar la pelota. Aún así, el primer gol llegó embarullado entre rebotes. Después del segundo, a los 7 del complemento, el encuentro terminó. El equipo de La Volpe no impuso resistencia, dejó de cubrir los espacios y excepto por Joel Campbell, no atacó.
Sin duda hubo un cambio. Argentina jugó mejor que los partidos anteriores aunque tal vez no sea un parámetro importante para tener en cuenta. El próximo sábado se enfrentará al segundo Grupo C. Las probables selecciones a conseguir esa plaza son Uruguay, Chile y Perú. Es decir que el panorama para los cuartos de final es complicado. Realmente rivales de peso a nivel continental que pueden causarle problemas al equipo de Batista pero donde pueden plantearse encuentros abiertos y bellos a la vista del público.
Colombia cumple con las expectativas
Sin duda, las mejores selecciones de la Copa América, aquellas que en la previa se creía iban a ser avasallantes, todavía no demostraron nada. De esta regla, la única excepción es Colombia. El conjunto de Hernán Darío Gómez, también conocido como “Bolillo”, se clasificó a la segunda ronda tras la victoria de ayer frente a Bolivia 2-0. Con 7 puntos el equipo cafetero terminó como líder del Grupo A (le ganó 1-0 a Costa Rica y empató 0-0 contra Argentina).
No deslumbra, no juega como el Barcelona pero tiene delanteros efectivos y un sistema de juego bastante aceitado donde cada uno sabe qué hacer en cada lugar del campo. Volantes que llegan como Freddy Guarín, un extremo muy hábil como Adrián Ramos, y Dayro Moreno que se las arregla jugando por derecha, en un lugar poco común para él. Ordenado defensivamente y con laterales que se prestan en ofensiva, Colombia consiguió, acaso, ser lo mejor en cuanto a rendimiento de la primera fase.
Puntualmente ayer, con dos tantos de Falcao, de estupenda temporada en Porto, venció a una selección muy pobre como Bolivia, y sin hacer mucho trabajo. El plantel de Gustavo Quinteros demostró ser un típico equipo que complica a los grandes pero que a la hora de enfrentar a los de menor importancia no tiene el mismo compromiso. Por ejemplo, frente a Argentina, estuvieron muy fuerte en la marca, cerca de Lionel Messi y con muy poquito llevaron algo de peligro al arco de Sergio Romero.
Sin embargo la sorpresa que generó ese resultado más la motivación de empatar justamente con el local en el debut, habiendo estado arriba en alguna parte del partido, no se reflejó en los encuentros posteriores. Tuvo una actuación pésima contra Costa Rica donde fue superado ampliamente y poco demostró ayer contra Colombia. Apenas un tiro libre y algunas jugadas individuales de Juan Carlos Arce.
En fin, Colombia accedió con justicia a los cuartos de final aunque todavía no está decidido su rival. Para eso deberá esperar hasta el miércoles cuando termine la fase de grupos. Por el contrario, Bolivia quedó eliminada y no gana un encuentro por Copa América desde la semifinal con México de 1997 donde fue local. Esto demuestra claramente lo que le cuesta jugar fuera de su país.